David Bastida Caro

Acidez Volátil

David Bastida Caro


La prensa

25/03/2025

Uno de los problemas a nivel de marketing y comunicación en este nuestro sector y que alguna vez hemos comentado aquí es la distancia que existe entre el mundo del vino en sí y el cliente final o consumidor. Este detalle que durante muchos años ha pasado desapercibido, o incluso lo hemos potenciado de una manera natural, parece que hoy nos ha estallado en cara. 
Durante años la publicidad y comunicación de todas o casi todas las marcas con más o menos importantes o más o menos peso específico en el sector han potenciado esta exclusividad o elegancia. Y aquí no hay diferencias entre denominaciones de origen, dado que tanto Rioja, como Ribera o cualquier otra lo ha hecho. Y lo ha hecho tanto desde la bodega en sí como desde el correspondiente consejo regulador. 
A todo esto aquí descrito pone la guinda la llamada prensa especializada, que durante años, en el mercado patrio, ha sido una amalgama de publicaciones que han ido apareciendo y desapareciendo por temas vinculados a la economía del sector. De hecho, algunas de las personas que escribían en dichas revistas han ido apareciendo en unas y otras en función de cómo dichas revistas han ido evolucionando. 
En el caso de la prensa internacional la cosa ha ido un poco diferente, ya que aunque ha habido revistas que también han ido apareciendo y desapareciendo hay dos publicaciones, como son Wine Spectator y Wine Advocate, que más que revistas del sector han actuado casi como guías de vinos encumbrando algunas veces a vinos y bodegas. 
Este sumatorio de factores, tanto nacionales como internacionales, ha ido dando al sector una capa de exclusividad y lujo. Como digo, durante años se ha entendido como un acierto de comunicación pero que viendo dónde estamos y visto con distancia no ha sido tan acertado.
Gran parte del público al que fue dirigida esta comunicación actualmente no bebe. Como aquí hemos dicho alguna vez,  por vocación tardía al deporte, por prescripción médica o por la DGT. Lo que está claro es que, volviendo al error, otras veces tenemos un público consumidor que ha cambiado bruscamente y seguimos ofreciendo la misma publicidad, comunicación y mensaje que hace veinticinco años. Un error que debemos subsanar. 

ARCHIVADO EN: Marketing, Economía, DGT