Un respiro para Armenia

David Hernando Rioja
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El especialista armenio en Neumología del hospital de Calahorra, Artur Yesayan, participa en un proyecto con el que forman a médicos de su país en técnicas respiratorias.

El neumólogo Artur Yesayan durante uno de los cursos en Armenia. - Foto: Artur Yesayan

El especialista armenio en Neumología de la Unidad de Medicina del hospital de Calahorra, Artur Yesayan, forma parte de un proyecto que tiene como objetivo formar en técnicas de terapias respiratorias a médicos de su país de origen, Armenia. 

Yesayan cuenta que el proyecto empezó en 2020 cuando se juntó con unos compañeros médicos franceses de origen armenio. La idea inicial, indica, era organizar unos cursos online para «ir reciclando a nuestros colegas médicos de medicina familiar y Atención Primaria allí en Armenia».

El proyecto siguió creciendo y más adelante, le invitaron a hacer cursos presenciales en Armenia. «El año pasado fuimos con ellos para dar cursos de RCP de urgencia y cardiopulmonar. Estuve de ayudante aplicando mis conocimientos en la parte respiratoria», señala.

Este 2024, subraya, se logró hacer un equipo de profesionales más numeroso, ya que «se unió Artur Sharluyan, un pediatra armenio que trabaja en Palma de Mallorca». Cada uno tenía su función, ya que este pediatra dio cursos de RCP para pediatras, los compañeros franceses que son urgenciólogos impartieron cursos de RCP y shock y «mi tarea fue impartir cursos sobre temas respiratorios, como el asma, epoc, tromboembolismo o edema pulmonar», describe.

Este especialista remarca la importancia de realizar este tipo de cursos en Armenia porque «la medicina de allí está privatizada y los médicos se forman como pueden. Si no tienes ningún apoyo por fuera, cada uno se forma por su propia cuenta». 

Otro problema es la barrera del idioma porque «si uno no domina el inglés, es bastante complicado la obtención de información». Argumenta que si allí van médicos de origen armenio que hablan su idioma les facilita mucho la tarea. 

Otra ventaja es que estos médicos armenios se benefician de los conocimientos de los profesionales sanitarios que acuden de otras zonas de Europa. «La medicina en España está en un alto nivel, con lo cual, todos los conocimientos que podemos impartir serán de gran ayuda», asegura.

Estos cursos han ayudado a la formación de 20 o 30 médicos y 50 o 60 enfermeras en dos años. «El primer año la gente no sabía de que iba el tema, así que vinieron pocos, pero el año pasado las cifras se triplicaron», destaca.

Las zonas en las que centraron sus esfuerzos fueron Goris, Kapan, Lori, Armavir, Gyumri y Yerevan. «Nos centramos en los hospitales comarcales porque en Armenia la medicina está más descentralizada y todos los hospitales grandes están en la capital. Eso hace que los hospitales comarcales se queden un poco abandonados y menos atendidos», explica.

Donaciones. Artur Yesayan recuerda que la empresa Vitalaire le comentó que antiguamente habían donado máquinas de ventilación no invasiva a países en desarrollo. «Al saber que estaba haciendo estos cursos, me ofrecieron donar a Armenia estas máquinas», cuenta.

Explica que son maquinas que en principio están en activo pero «por superar las horas de uso establecidas, el fabricante no se hacer cargo de mantener la garantía». «Las retiran para el uso directo con los pacientes pero funcionan y se pueden aprovechar perfectamente», asegura.

Reconoce que en Armenia no estaban muy interesados porque «no sabían para que servían. Pero al saber que yo iba a hacer estos cursos, se interesaron y conseguimos llevar unas 15 máquinas».