Tras el reciente temporal en España los ríos del norte empiezan a recuperar caudales más normales después de varios desbordamientos, pero Aragón sigue muy pendiente del Ebro, y unos sesenta efectivos de la UME y 26 medios han sido desplegados en las riberas de sus municipios para evitar impactos por la crecida.
Dada la abundancia hídrica del Ebro por las fuertes lluvias y nevadas de los últimos días, el Gobierno de Aragón ha implementado el plan de Protección Civil en fase de emergencia de nivel 2, por el que se activan automáticamente medios del Estado, en este caso el cuarto batallón de la Unidad Militar de Emergencias (UME).
Según las últimas estimaciones, la crecida sería de carácter ordinario sin que parezca probable superar los 1.600 m3/sg de caudal este viernes por la tarde del Ebro en su paso por Zaragoza, aunque en las últimas horas al penetrar en la comunidad, ha dejado inundaciones en campos de los pueblos ribereños.
Por el momento, el caudal es de unos 2.000 m3/sg y una altura que en Novillas ha superado los 7 metros, lo que exige estar pendientes pero no con una alarma "exagerada", ha subrayado el delegado del Gobierno en Aragón, Fernando Beltrán.
"No estamos hablando del tipo de crecida extraordinaria que hemos tenido años anteriores", ha añadido.
Todos los medios desplegados con la colaboración de la Guardia Civil vigilan fundamentalmente el estado de caminos y carreteras así como las instalaciones ganaderas y agrícolas que suelen tener afecciones cuando hay avenidas del Ebro, según Beltrán.
En Navarra, los ríos también han recuperado la normalidad tras la abundancia de caudal de los últimos días, salvo el Ebro en Castejón, en situación de prealerta.
En las últimas horas como estaba previsto se produjo la punta de la crecida del río en poblaciones como Tudela y Castejón, en donde anegó campos de cultivo y zonas próximas a los ríos, aunque sin afectar de forma tan relevante como en ocasiones anteriores a núcleos urbanos.
En Tudela sin embargo el agua obligó a cortar temporalmente el tráfico en alguna calle del casco viejo, mientras que por otra parte, las carreteras de la región han recuperado la normalidad tras los cortes de estos días por las inclemencias del tiempo.
En el País Vasco, el pantano alavés de Ullibarri pasará a aumentar hasta los 40 metros cúbicos por segundo el ritmo de desembalse una vez comprobado que el caudal del río Zadorra a su paso por Abetxuko ha descendido.
Según han informado fuentes de la Agencia Vasca del Agua, URA, el pantano incrementa así su ritmo de desembalse frente a los 31 metros cúbicos por segundo para aumentar el resguardo ante la posibilidad de nuevas precipitaciones.
El desembalse comenzó a las cuatro de la madrugada del miércoles tras rozarse el 89 % de su capacidad.
A nivel meteorológico, la llegada y paso de un nuevo frente este jueves desde el noroeste por la península mantendrá en alerta naranja (riesgo importante) por temporal marítimo a Galicia y también a Cataluña que además lo estará por viento y nevadas.
En nivel amarillo con riesgo para ciertas actividades por dichas inclemencias o alguna de ellas, estarán además hoy Canarias, Andalucía, Aragón, Asturias, Cantabria, Madrid, País Vasco, Comunidad Valenciana, y la ciudad autónoma de Melilla, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en su página web.
Para mañana está previsto que la situación empeore, con más comunidades en alerta naranja: todo el litoral cantábrico, por temporal marítimo y además Galicia también por lluvias; asimismo activará la alerta naranja Cataluña, por viento, oleaje, lluvia y nieve.
Para este jueves, en el prelitoral de Tarragona se prevén rachas de 90 kilómetros por hora y temporal marítimo en Galicia, con olas de 6 a 7 metros en A Coruña, y también habrá mala mar, con oleaje de 3 a 4 metros en Cataluña, especialmente en el Ampurdán (Girona).
En el valle de Arán (Lleida) las nevadas acumularán hasta 5 centímetros en 24 horas en cotas de entre 1.000 y 1.300 metros.
En la sierra madrileña las rachas serán de hasta 80 kilómetros por hora y asimismo soplarán fuertes los vientos en Aragón y la Comunidad Valenciana.