Grañón tiene una magia que no deja indiferente a los peregrinos», reflexiona Francesc Busquets, encargado de garantizar la calidad técnica de las transmisiones eucarísticas y artífice de la iniciativa.
Natural de Tona, localidad ubicada en el interior de Barcelona, es una más de esas personas que se enamoraron de Grañón «el pueblo más hospitalario del Camino», gracias a su experiencia en la Ruta, que recorrió por primera vez en 2010.
Ese año, Busquets, que había trabajado como técnico de sonido en giras mundiales de grandes artistas internacionales, como Justin Bieber o Rihana, La Fura dels Baus o Els Joglars, dio un giro de 360 grados a su vida y encendió una llama que había prendido casi una década atrás. Era el 25 de julio de 2001, mientras sonorizaba un concierto de Carlos Núñez en la Plaza del Obradoiro de Santiago cuando vio a dos peregrinos, «que llegaban, dejaban sus mochilas, se abrazaban, lloraban y flipé», cuenta. Hubieron de pasar casi 10 años para decidirse a emprender el Camino aprovechando un parón entre las largas giras. «Lo hice y me giró la cabeza», recuerda el técnico, que decide el 9 de marzo de 2011 «dejarlo todo atrás», regalar dinero a sus amigos y «buscar simplicidad de la vida».
Y se dejó llevar. En ese tiempo, entre otras aventuras, creó Radio Camino de Santiago, que estuvo operando desde Grañón varios años con otro responsable y donde se trasladó a vivir el año pasado.
Con la voluntad de «ayudar» al pueblo y, sobre todo al Camino, «que es mi obsesión», decidió aprovechar sus conocimientos en sonido e ideó la transmisión de la misa, una inquietud que compartió con otro recién llegado, el sacerdote, que llevaba desde noviembre residiendo en el municipio.
Cuenta que están recibiendo comentarios alentadores sobre esta iniciativa y considera que está encajando «muy bien» en la modernización de la iglesia.
Apunta que no es el número de visionarios su principal foco de interés, sino que busca calidad en la emisión y ser capaz de transmitir la sensación que se vive en la ceremonia. «Trabajes para mil o 50.000, debes hacerlo siempre lo mejor posible», opina Busquets, que asegura que es muy «exigente» con su tarea, afirmación que ratifica el párroco, quien le permite «trabajar con total libertad».
Códigos QR con información de la iglesia. El siguiente paso que están planeando dar es crear una web en la que, además de acoger las misas y la hoja parroquial que actualmente se edita, peregrinos y el resto de visitantes puedan acceder a través de códigos QR a información sobre el retablo, de mediados del siglo XVI, perteneciente a la escuela de Damián Forment, y restaurado en 1993, y la iglesia, levantada entre los siglos XV y XVII. «Lo que me interesa no es solo el patrimonio con el que contamos, sino también su sentido cristiano», explica el párroco, Alejandro Pérez, que incide en su voluntad de que profundicen sus conocimientos sobre «el porqué del Camino de Santiago y su vinculación con Grañón desde hace siglos, por que Santiago Peregrino o San Roque».
En este contexto, explica que anda en la búsqueda de personas que puedan hacer un acompañamiento virtual [algo similar a un director espiritual] a quien realiza el Camino , que no debe ser solo algo físico «sino también un camino de encuentro personal y con Dios». Pretende ofrecerlo a todo el mundo que recorra la Ruta Jacobea y ya cuenta con cinco mujeres, ninguna de ellas religiosa, que ofrecerían este acompañamiento «a quien lo necesite en el Camino» a través de la web.