Adiós a la condición de invicto

El Día
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Un descomunal gol de David Nates en la segunda mitad corta en once la racha de partidos sin perder de la SD Logroñés, que también había conseguido pleno de victorias a domicilio

Cuanto más se alarga una racha en el tiempo, más cerca está de terminar. Y ayer la Sociedad Deportiva Logroñés claudicó frente al Gernika en Urbieta, poniéndole punto y final a la racha de once jornadas consecutivas sin perder, en las que el conjunto de Carlos Pouso ha logrado seis victorias y un empate antes de caer por primera vez esta temporada.

FICHA TÉCNICA: 

SD GERNIKA. San Nicolás; Larrauri, Berasaluce (Collante, 70'), Lorente, Asier Seijo (Aguirrezabala, 70'); Huete, Santolaya (Arzalluz, 70'), Laka, Barck (Barba, 57'), Pacheco y David Nates.

SD LOGROÑÉS. Uri; Albizua, Montero, Argente (Lamadrid, 68'), Nacho Ruiz; Castillo (Kepa Vieites, 79'), Gaubeka, Castañeda (Raúl Rubio, 68'), Basurto, Pau Miguélez (Sergio Gil, 68'; Pedro Augusto, 79') y Álvaro García.

ÁRBITRO. Eduardo Rodríguez García (Asturias). Amonestó a los jugadores locales Ander Fernández, Asier Seijo y Arzalluz; así como a los visitantes Iván Castillo, Argente, Basurto y Raúl Rubio.

INCIDENCIAS. Partido en Urbieta correspondiente a la novena jornada del Grupo II de Segunda RFEF. Antes del inicio del encuentro, se ealizó un saque de honor de la jugadora de la cantera Ziara Vega, subcampeona del mundo con la Selección Española sub-17, previamente autorizado por la RFEF.

Llegaba la SD Logroñés a Urbieta como un visitante temible dentro del Grupo II, con pleno de cinco victorias en sus cinco desplazamientos lejos de Las Gaunas. La primera mitad se saldó sin ninguna ocasión manifiesta para los dos conjuntos. Mucho respeto entre ambos conjuntos, que utilizaron el primer cuarto de hora para estudiarse mutuamente y sin casi acercamientos con peligro.

Fue creciendo con el paso de los minutos el conjunto de Carlos Pouso, que lo intentó tímidamente con un par de disparos lejanos que no pusieron en apuros a Groka San Nicolás. No hubo más a lo largo de los primeros 45 minutos, que terminaron con el resultado inicial.

Tras el paso por vestuarios llegó la acción y se animó el partido en el feudo vizcaíno. Seguía imperando la igualdad en el marcador, pero el Gernika iba creciendo en confianza con el paso de los minutos, hasta que llegó el zarpazo de David Nates que, a la postre, iba a ser definitivo.

Cinco minutos pasaban de la hora de partido cuando el delantero del conjunto local realizó una gran acción individual, con recorte en la frontal para zafarse de su par y colocar un potentísimo disparo en la escuadra ante el que nada pudo hacer Uri, espectador de lujo del que iba a ser el único gol del encuentro.

A raíz del gol zarandeó el árbol Carlos Pouso y acudió al banquillo para encontrar respuestas a un equipo que  no terminaba de dar con la tecla del que había acostumbrado a ser a domicilio. Se sentaron Argente, Miguélez y Castañeda para dar entrada a Lamadrid, Raúl Rubio y Sergio Gil, jugadores más ofensivo en aras de conseguir el empate. Este último tuvo que retirarse por lesión  apenas diez minutos después, dejando su sitio a Kepa Vieites. También entró Pedro Augusto por Castillo.

No obstante, ninguno de los cinco cambios surgió el efecto deseado, y aunque la SD Logroñés estuvo hasta el último minuto del añadido buscando el tanto del empate, iba a firmar en Urbieta, contra el Gernika de Gorka Iraizoz (entrenador) y Aitor Larrazabal (director deportivo), viejos conocidos blanquirrojos, su primera derrota de la temporada, poniendo también la primera mancha a sus inmaculados registros como visitante, donde su bagaje es ahora de cinco de seis.