Una limitada subida de la renta en La Rioja que muestra la Encuesta de Condiciones de Vida se refleja como un espejo en el conocido indicador AROPE de riesgo de pobreza o exclusión social, que continúa creciendo y afecta ya al 22,6% de los ciudadanos de esta comunidad, frente al 21,8% del año anterior y el 20,9% de 2022.
Cierto es que es una cifra 3,2 puntos porcentuales inferior a la media española (25,8 %), pero, sin perjuicio de ello, la evolución en el país es positiva y se va reduciendo la cifra, que alcanzaba al 26,5 en 2023 y el 26% y un año antes. Por ello, es la octava comunidad con datos más altos en un ránking que oscila entre el 15,5% del País Vasco y el 37,5% de Andalucía.
Si solo se tiene en cuenta el riesgo de pobreza -AROPE contempla también la carencia material y la baja intensidad en el empleo-, los porcentajes de La Rioja y España están cada vez más cerca -del 19,4% y el 19.7%, respectivamente-con esta comunidad arrojando el nivel más elevado desde 2013, y superando en diez puntos al del País Vasco.
poca dificultad. El empeoramiento general de la situación económica de los hogares hace que crezca la cifra de los que tienen dificultades para llegar a fin de mes, el 5,9 -el 4,8% un año antes-, aunque sigue siendo una de las cifras más bajas del país, solo más elevada que País Vaco y Baleares, y 3,2 puntos inferior a la media. De hecho, cerca del 60% de los hogares llega a fin de mes con facilidad, aunque hay otros que manifiestan carencias de cierta relevancia.
De acuerdo con los datos del INE, el 26,6% de los hogares riojanos no puede permitirse ni una semana de vacaciones -el 32,4 en España-;el 25,4% no pueden hacer frente a gastos imprevistos -34,9-; y el 7,9 tiene retrasos en el pago de la vivienda principal -10,3-.
Y respecto a la vivienda, la Encuesta de Condiciones de Vida apunta que el 78,4 % de los hogares riojanos tiene la vivienda en propiedad, una diferencia en porcentaje de 4,8 puntos respecto a la media nacional (73,6 %); un 12,8 % vive en alquiler a precio de mercado (17 % en España), mientras que un 1,3 % vive en alquiler a un precio inferior al de mercado (3,4 % en el conjunto del Estado).
El 14,6% de los hogares de esta comunidad no puede permitirse mantener la vivienda con una temperatura adecuada -17,4% en el país-, y hay un 3,1% que no puede poner sobre la mesa una comida de carne, pollo o pescado al menos cada dos días. Es el índice más bajo de toda España.