La Rioja se mantiene tradicionalmente -una tendencia que no se revertió ni en los años más duros tras la crisis de 2008 ni tampoco durante la pandemia- con cifras de desempleo más bajas que en el conjunto del país, un extremo que ha vuelto a confirmar la Encuesta de PoblaciónActiva (EPA) del tercer trimestre del año, que atribuyó a esta comunidad una tasa de paro del 10,22%, un punto menos que el 11,21% nacional, resultados que, además, llegan condicionados por un elemento estacional decisivo, el verano, con menor influencia en el mercado laboral regional.

A diferencia de esta variable, siempre favorable para La Rioja en la comparativa con la media, los salarios, y también de forma habitual, son más bajos que en el conjunto del país, una circunstancia que tampoco se alteró en 2023. 

Así y según el Decil de salarios del empleo principal, que hizo publicó el viernes el Instituto Nacional de Estadística (INE), el sueldo medio en La Rioja fue el año pasado de 2.249 euros brutos mensuales, ligeramente por debajo de la media nacional, que se elevó a 2.273. El documento explica que la estructura productiva de cada comunidad autónoma condiciona de manera notable el nivel salarial y, un año más, es el País Vasco, con 2.625 euros, el territorio con los sueldos más altos. Le siguen Madrid, con 2.575 y Navarra, con 2.515, comunidades que llevan ocupando las primeras posiciones desde hace años. Cataluña (2.439) y Cantabria (2.317) también se sitúan por delante de La Rioja, que ocupa una posición inmediatamente anterior a Aragón, donde se ganan únicamente cinco euros menos, 2.244. Cierran el ránking Extremadura (1.916 euros)  y Canarias, donde el salario medio es de 1.987, las dos únicas comunidades que se sitúa por debajo de los 2.000 euros.

Estas posiciones no han cambiado desde el año anterior, a pesar de una subida salarial -según indica el INE, que ha elaborado con el informe con datos de la EPA, la Seguridad Social y el IRPF- superiores al 7%. En concreto, en  esta comunidad el alza alcanzó el 7,3% sobre los 2.085 de un año antes, igual que la media del país, aunque la subida bruta fue algo superior en La Rioja, 164 euros, frente a los 154 euros nacionales.

Los deciles. Esta estadística del INE muestra también el decil salarial, que viene definido por el medio del grupo y por los sueldos  inferior y superior que lo delimitan. La población ocupada en 2023 fue de 18.000.200 personas y en cada decil hay, por tanto, unos 1,80 millones de asalariados.

En La Rioja, había en diciembre, y según los datos de la Seguridad Social, 136.555 afiliados, esto es 13.655 por decil, de los que 30.500, el 24,7%, casi uno de cada cuatro riojanos, se encuentra en los tres deciles más bajos con una nómina  inferior a 1.535 euros.

El grueso de la fuerza laboral regional se adscribe a los sueldos intermedios, esto es aquellos que perciben entre 1.535 y 2.548 euros, y son 60.700 trabajadores, cerca de la mitad, el 49,1% del total.

Son 32.400 los que tienen altas retribuciones, de tal manera que el 26,2% de los trabajadores de esta comunidad tienen un sueldo bruto mensual de 2.548 o más euros.

Estos datos difieren de los que arroja la media nacional, que suma más asalariados en los deciles altos y bajos, una circunstancia que convierte a esta región en una sociedad más igualitaria. 

En España, también el grupo más numeroso  está constituido por el 40% de asalariados que están en los deciles intermedios y unas 7.200.100 personas, tuvo un salario bruto mensual entre 1.535 y 2.548 euros.

Un segundo grupo lo constituye el 30% de activos que se encuentra en el tramo alto de la remuneración. Son unos 5.400.100 asalariados con un sueldo bruto mensual de 2.548 o más euros. El 30% restante de los ocupados está en la zona baja salarial. Son aproximadamente 5.400.100 personas y ganaron menos de 1.535 euros.

La diferencia también es notable por comunidades autónomas,  y las regiones que tuvieron una mayor concentración de salarios altos fueron País Vasco (el 43,9% ganó 2.548 euros mensuales o más), Navarra (39,5%) y Comunidad de Madrid (37,3%).

En el lado opuesto, las que tuvieron un mayor porcentaje de nóminas con sueldos bajos (inferior a 1.535 euros) fueron Extremadura (42,9%), Región de Murcia (37,2%) y Canarias (36,6%).