Logroño honra con flores a su 'Alcaldesa Mayor'

El Día
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La ciudad de Logroño, con colectivos y particulares, brindan una vistosa y concurrida ofrenda floral a su patrona, la Virgen de la Esperanza, en las vísperas de su festividad, el próximo 18 de diciembre

Flores depositadas en la calle Portales en honor a la patrona de la ciudad. - Foto: El Día

La ciudad de Logroño ha brindado este domingo una vistosa y concurrida ofrenda floral a su patrona y 'Alcaldesa Mayor', la Virgen de la Esperanza, en las vísperas de su festividad, el próximo 18 de diciembre.

La ofrenda se ha celebrado a las puertas del Palacio de Chapiteles, sede del antiguo Ayuntamiento de Logroño, sobre el que se ha instalado un pequeño altar, con la imagen de la Virgen, a cuyo alrededor se han depositado las flores, informa Efe.

La pareja de vendimiadores de las Fiestas de San Mateo, de 2024, Marta Gil y Marcos Ascacíbar han depositado el centro floral del Ayuntamiento, al que han seguido las ofrendas de otras instituciones.

Entre ellas, el Gobierno de La Rioja, el Parlamento de La Rioja o la Delegación Episcopal de Enseñanza de la Diócesis, partidos políticos, el Instituto Social de las Fuerzas Armadas, el Consejo de Infancia de Logroño, cofradías de la ciudad, asociaciones vecinales, peñas, casas regionales, grupos de danzas y diversos colectivos ciudadanos benéficos, sociales, culturales, participativos, interculturales, comerciales y educativos. Además, varios ciudadanos se han acercado con su ofrenda a título particular.

El acto ha contado con la participación destacada del Grupo de Danzas de Logroño, que ha hecho el pasillo de acceso al altar a la Virgen de la Esperanza y a los miembros de su Cofradía y han interpretado una jota en su honor.

La hermana mayor de la Cofradía, María José González, se ha dirigido a la Virgen de la Esperanza, a la que "los logroñeses, desde hace más de 400 años, hemos acudido en tiempos de dificultades", ha dicho.

Tras agradecer la participación de la ciudadanía en este emotivo acto, ha leído unos versos del himno de la Virgen.

Mayor presencia y compromiso de mejora del escenario

Concluida la ofrenda, la primera autoridad municipal, Conrado Escobar, se ha dirigido a los asistentes para "felicitar como alcalde y como logroñés, a los que hacéis posible este acto".

En primer lugar, a la Cofradía de la Virgen, que consigue que "cada año se haga más presente en las actividades en la calle y que los logroñeses estemos a su lado escribiendo, dibujando, corriendo, rezando, o acompañando a quien se acuerda de ella cuando tiene una necesidad".

Escobar también ha felicitado la presencia de la Corporación en este acto y ha dicho que "en esto no hay colores políticos".

Asimismo, ha expresado el compromiso del Ayuntamiento por "mejorar todo lo que rodea a la patrona, empezando por el hecho de que este próximo año se iniciarán obras en la Glorieta, que comenzarán por esta zona, por Muro del Carmen, Muro de Cervantes y la conexión con la Glorieta".

Ello permitirá que "nuestra patrona y Alcaldesa Mayor ocupe un lugar mejor el próximo año", ha subrayado.

Entre otras autoridades, el acto ha contado con la presencia del presidente de La Rioja, Gonzalo Capellán; el alcalde de Logroño; y miembros de la Corporación Municipal.

También han participado los miembros de la asociación de recreación histórica Héroes del Revellín, ataviados con su vistosa vestimenta, que, junto a los trajes del Danzas de Logroño, y sus danzas a la patrona, y la propia ofrenda floral, han enaltecido el acto.

Esta ofrenda floral, organizada por el Ayuntamiento de Logroño y la Cofradía de la Virgen de la Esperanza se incluyó, como novedad el año pasado, entre la programación en torno a la festividad.

La historia de la patrona de Logroño se remonta, según la fecha conocida, a 1656, año en el que un labrador de la ciudad, Gregorio de Villanueva, llevó a la Virgen una cántara de aceite, con el objetivo de mantener la lámpara que ardía siempre delante de la imagen, iniciativa que repitió cada año.

Según datos recogidos por la Cofradía que le representa, fueron los labradores quienes se pusieron, en primer lugar, bajo la protección de la Virgen, a la que rogaban y pedían ayuda en momentos de sequía o de cualquier otro problema relacionado con el campo.