El solar que en su día albergó las instalaciones de Muebles Lis ha dejado de estar en barbecho. La semana pasada comenzaron los trabajos previos en este terreno que desde hace años tenía previsto albergar una residencia de ancianos. Y ha sido estos días previos cuando se ha desplegado toda la artillería pesada para comenzar a construir la estructura del nuevo edificio residencial en avenida de Lobete 56.

El grupo Vitalia Home, que cuenta con 66 centros en toda España, está detrás de este proyecto. El Ayuntamiento de Logroño concedió el pasado 17 marzo a Geralia Home, sociedad de la firma aragonesa, la licencia de obras y actividad. Han tenido que pasar tres meses para que dieran comienzo los trabajos sobre el terreno que, ahora sí, reactivan un proyecto que llevaba parado casi un lustro. 

Vitalia Home construirá un edificio de baja más seis alturas anexo al inmueble residencial de la antigua 'Mermeladas Eva', en un terreno de algo más de cuatro mil metros cuadrados. Su estructura será en forma de 'L', manteniendo la fachada principal alineada con avenida de Lobete. La otra parte del inmueble se levantará hacia el interior de la parcela, con orientación este-oeste, en cuyo extremo perderá una altura y quedará con cinco. Contará, además, con zona libre privada, tal y como figura en la modificación puntual del Plan General que se aprobó en 2019 en la unidad de ejecución 12.4 'Muebles Lis'.

La nueva residencia de personas mayores contará con 158 plazas, oferta que se sumará a las más de nueve mil que el grupo Vitalia dispone en todo el país. El centro abrirá sus puertas a partir de 2025, una vez concluido el plazo de ejecución previsto de 24 meses, más  la legalización de todo el proyecto. 

El grupo Vitalia está especializado en la rehabilitación neurológica y funcional, fundamentalmente en el tratamiento de aquellas dolencias de daño cerebral. También ofrece estancias temporales y servicios ambulatorios a los usuarios. 

Además de los empleos que se generarán con la construcción de este centro, hay que contar con los que se crearán para garantizar la atención de los residentes, como    personal médico y de enfermería,    administrativo y de servicios.

Otros solares yermos

Por el momento,  el de Lobete 56 es el único terreno que está en fase de desarrollo en esta avenida que aún conserva gran parte de la estampa industrial del polígono que fue en su día. No ocurre lo mismo con la superficie que ocupa la unidad de ejecución 12.5 'Residencial Lobete 2005', cuyo estudio de detalle aprobaba el pasado 24 mayo la Junta de Gobierno Local y que hacía prever que su desarrollo iba a producirse en el corto plazo. Pero nada más lejos de la realidad. El suelo llamado a ocupar nuevos bloques residenciales seguirá yermo. Los planes de negocio de las promotoras no contemplan en un horizonte cercano promover obra nueva, tal y como confirma al El Día de La Rioja una de estas empresas.

Este terreno, que tiene unas dimensiones nada desdeñables de más de 13.000 metros cuadrados, está preparado para desarrollar un gran bloque lineal de seis alturas frente a Lobete, uno independiente más próximo al cajón ferroviario de ocho alturas y una parcela dotacional al sureste. 

Lo que se aprobó en este estudio de detalle son cuestiones técnicas para adaptar la propuesta de desarrollo urbanística a la realidad actual, haciéndola más permeable y sostenible, ya que el planeamiento se aprobó hace casi dos décadas, cuando el soterramiento del ferrocarril aún no estaba ejecutado. Así, se mejora la comunicación entre Lobete y el parque del ferrocarril, se modifican alienaciones, se aumenta la distancia entre edificaciones y se posibilita la construcción de terrazas en las futuras viviendas sin comprometer su superficie interior. 

El remate de la unión de Cascajos y Lobete sigue judicializada

La división de Cascajos y Lobete persistirá en el futuro más inmediato. La unión de las calles Baltasar Gracián con Obispo Rubio Montiel sigue en el aire hasta que la Justicia no se pronuncie sobre la nueva ordenación del PERI 15 de Lobete II aprobada hace cuatro años y que se topó con cuatro recursos: el del Gobierno de La Rioja, a través de la Comisión de Ordenación del Territorio y Urbanismo de La Rioja (COTUR); la Asociación de Empresarios de la Construcción y Afines de La Rioja (CPAR); varios propietarios con actividades en la zona y una sociedad madrileña, Gamayalde Sociedad Consultora SL.

La nueva ordenación que ha sido objeto de recurso modifica por completo la actual fisonomía de Lobete entre los números 38 y 54, incluyendo también el tramo de la calle Nueva (números 1 al 11), con nuevas zonas destinadas a uso comercial y residencial. 

Una de las principales actuaciones que se contemplan es la prolongación de la calle Baltasar Gracián sobre el cajón del ferrocarril hasta avenida de Lobete, atravesando el espacio que hoy ocupa el inmueble que en su día fue el concesionario de Audi. En esta intersección está proyectada, además, una rotonda para regular el cruce con la calle Obispo Rubio Montiel. 

A un lado de este nuevo vial están planificados dos bloques residenciales con capacidad para un centenar de pisos y bajos comerciales: uno en forma de 'L' de baja más siete alturas y una torre de nueve junto a la calle Nueva. Frente a este terreno, está prevista también una dotación comercial para un supermercado junto a la gasolinera, que se mantendría.