Ander Iruarrizaga (Igorre, 1998), Iru por sentido práctico y herencia familiar, llegó a principios de verano a la portería de la Sociedad Deportiva Logroñés. Tenía la difícil misión de suceder a Jero Lario, posiblemente el jugador más determinante en estos últimos tres años de la entidad logroñesa. En tan solo cuatro partidos, el vizcaíno ha demostrado estar a la altura de su predecesor. La portería blanquirroja está a buen recaudo.
Un portero se hace, pero en su caso también se nace. Da la sensación que con su apellido (su padre fue metade Primera y su tío lo fue en el Athletic) estaba destinado a ponerse bajo palos.
Pues tengo que confesar que cuando empecé a jugar al fútbol lo hacía de delantero. Pero un día, antes de un entrenamiento, me encontré con una camiseta de mi aita (ex portero del Compostela) y le dije: 'Aita, me voy a poner de portero'. Y el caso es que le cogí el gusto a esto de echarme por el suelo.
Sale del Athletic y es de los primeros en enrolarse en el proyecto blanquirrojo.
Cuando me enteré que no iba a seguir, me fastidió, como es lógico. ¡Uno entra en el Athletic y quiere quedarse toda la vida! Pero es cierto que sabía que esto me podía venir bien. Venía de un año en blanco y un futbolista lo que necesita es jugar. Cuando me llegó la oferta en firme, hablé con el director deportivo (JuanmaBarroso), me explicó el proyecto, me pareció interesante y no me lo pensé mucho.
¿Cree que la Sociedad Deportiva Logroñés es un club trampolín?
Creo que sí. Es cierto que nos hemos juntado muchos jugadores que venimos de donde venimos y que lo que queremos es jugar. La directiva y la dirección deportiva confían en nosotros. Sí sirve de trampolín. Se vio el año pasado e incluso en el anterior.
Forma parte de un equipo coral pero usted ha sido capital en los dos triunfos ante el Sestao y el Sabadell.
Cuando se necesita al portero es cuando tiene que aparecer. Es cierto que con el Sestao hubo que aparecer. Pero somos once, no solo uno. Sé que van a llegar otros días en los que no voy a tener la suerte de hacerlo tan bien.Estoy preparado para ello. Personalmente, no me gusta ni que me elogien ni que me critiquen. Soy muy consciente cuando lo hago bien y cuando lo hago mal.
Me da la impresión de que usted es un portero clásico. Y con esta afirmación no quiero ser reduccionista.
Tengo la sensación de que cada vez se le exige más a un portero. Antes la misión del guardameta era solo parar. Ahora se quiere uno grande, que vaya bien por abajo y que la saque jugada. Creo que lo que tiene que hacer un porteo es parar. Y si ya juega con los pies, pues mejor.
Jero, su antecesor, tenía una manejo excelente con los pies.
Lo sé, lo sé. Un porterazo.
Por cierto, más allá de los referentes familiares, ¿quiénes han sido sus modelos bajo los palos?
Siempre me ha gustado Iker Casillas. Y de los actuales, pues hasta la lesión, Courtois. Sin duda.
Cuatro partidos y su equipo es tercero con 9 puntos. ¿Se imaginaba algo así?
Es cierto que la pretemporada fue un tanto agridulce pero antes de enfrentarnos al BilbaoAthletic estábamos convencidos de que íbamos a hacer un buen papel. La victoria nos dio confianza. Es cierto que con el Arenteiro no estuvimos bien pero sabemos de lo que somos capaces.
Son días de celebración en Logroño. No hay duda de que los sanmateos son más fiestas que el Aste Nagusia. ¿No sé si disfruta de ellas?
He estado por Logroño, sí. Nunca había estado en San Mateo y reconozco que hay mucha animación.Están bien.
La temporada pasada se hablaba del Euskologroñés por la cantidad de jugadores vascos que había. En defensa tiene a cuatro paisanos...
Es cierto. Un día me senté en el rincón y ahí estábamos todos los vascos y se comentó lo del Euskologroñés. Estamos nosotros y Dani Garrido, que al ser de la Real lo contamos también. El ambiente es muy bueno.
¿Entiendo que habrá bromas con Ezkurdia y Dani Garrido?
Sí, nos tiramos pullas pero todo bien, muchas bromas.
Llevamos un mes de competición pero qué espera en lo colectivo de esta temporada.
Es pronto para hablar de objetivos. Son cuatro partidos. Nos centramos en el Rayo Majadahonda. Estoy seguro de que vamos a hacer un gran papel. Nos vamos a dejar todo en el campo. Nos podrá ir mejor o peor, pero nos vamos a vaciar en el terreno de juego. Y si lo damos todo, nos va a ir bien.
¿Y en lo personal?
Me centro en el trabajo día a día porque es lo que te hace crecer.
¿Mejor la 1ª RFEF que la 2ªB?
Hay un nivel bastante alto, mucha igualdad. Hay mucho más nivel que en 2ªB.
En la ciudad tiene otros dos paisanos. ¿Habla con ellos?
Sí, sí. Ander Vitoria y Yurre son de Igorre. Con Ander he hablado mucho...