La Villanueva, uno de los barrios logroñeses que han sufrido en mayor medida la degradación urbana en las últimas décadas, sitúa en parrilla de salida varias iniciativas en materia de promoción empresarial, vivienda, equipamiento sanitario y reurbanización que irán materializándose entre el presente año y 2025 para culminar un plan de regeneración que fije población y actividad productiva, en gran media vinculada a las nuevas tecnologías.
En parte, ese carácter de 'barrio tecnológico' vendrá dado por la construcción en la zona, probablemente en el entorno de las calles Hospital Viejo y La Brava, de pisos para trabajadores de la empresa Bosonit. Esa operación se concretará en un convenio entre la compañía y el Ayuntamiento, que se publicará en breve, por el cual se realizará en La Villanueva la parte residencial del proyecto inicial de la sede de Bosonit en Marqués de San Nicolás, que reducirá su tamaño para evitar el impacto patrimonial en la zona.
En las dos parcelas que el Ayuntamiento de Logroño tiene en esas dos calles está previsto edificar también 40 pisos del plan municipal de vivienda en alquiler para jóvenes a precios asequibles, en un proceso en el que ya trabaja el Consistorio. El objetivo es licitar las parcelas para adjudicárselas a empresas que lo exploten en régimen de derecho de superficie y que las viviendas puedan estar construidas durante el presente mandato.
Otra de las palancas clave para revitalizar un entorno comprendido por las calles Rodríguez Paterna, por el oeste; Avenida Navarra, por el este; y desde Muro de Cervantes por el sur hasta Avenida de Viana por el norte, será el vivero de empresas y espacio de coworking (trabajo colaborativo) en el antiguo colegio San Bernabé, cuyas obras deberán concluir antes de septiembre.
Y el interés de emprendedores y empresas por instalarse en ese espacio parece claro. Lo comenta el concejal delegado de Arquitectura y Casco Antiguo, Íñigo López-Araquistáin, que detalló a El Día de La Rioja que hay ya entre cinco y seis empresas que han mostrado su disposición cierta a implantarse o trasladar parte de sus oficinas al futuro vivero. El edil, que elude desvelar sus nombres hasta que se cierren los acuerdos, apunta que algunas son firmas de renombre, las hay del sector tecnológico y una con componente público estatal. De hecho, desde las áreas municipales de Arquitectura y Promoción de la Ciudad han realizado ya visitas con representantes de las compañías para que conozcan el centro.
En la agenda municipal de intervenciones en La Villanueva, en cuyo corazón hay siete calles popularmente conocidas como La Judería, hay también dos nuevos proyectos de urbanización. Como explica López-Araquistáin, en respuesta a las peticiones vecinales, que reclaman mejoras similares a las acometidas en las calles Hospital Viejo y Los Yerros, se ha redactado ya un proyecto para reurbanizar San Gil y San Roque (la mitad, ya que el resto se hará en otra fase) y una parte de Rodríguez Paterna, en este último caso para soterrar cableado. La obra tiene un presupuesto de 121.000 euros y la idea es licitarlo e iniciarla este año.
Algo más lento va el segundo proyecto de urbanización, que reformará las calles Los Baños y Ochavo, esta última la más pequeña de la ciudad. En este caso, la idea del equipo de Conrado Escobar es iniciar las obras a primeros de 2025.
También se acometería el próximo año la segunda fase de San Gil y San Roque, dado que en el presupuesto actual no hay partida. Ambas urbanizaciones se afrontarán con fondos propios, ya que no estaban incluidas en el proyecto de regeneración de La Villanueva que recibió en su día fondos europeos.
En su recta final está también el nuevo centro de salud de La Villanueva, en Avenida de Viana. El Gobierno regional, del que depende, anunció en marzo su apertura tras el verano, pero fuentes del Ejecutivo regional indicaron ayer que la fecha se anunciará próximamente.