Hasta el 10 de febrero no vamos a cobrar, por lo que estaremos 70 días sin ingresos». El presidente del comité de empresa de Fal, Juan Pedro López, se queja amargamente de la escasa disposición del Servicio Público de Empleo Estatal (Sepe) de hacer efectivo el pago del subsidio a los 72 trabajadores que se encuentran en un Erte que recibió el visto bueno el 2 de enero. «No comprendemos cómo es posible que con el Erte aprobado, nadie haya dado la orden para que hubiéramos podido cobrar el día 10», lamenta López, que argumenta que el arduo trabajo realizado para lograr la aprobación del expediente en «tiempo récord» no haya sido suficiente para el pago este mes.
Señala que, «por más que hemos tocado puertas», nadie ha ofrecido una explicación», lo que demorará el cobro hasta el 10 de febrero, lo que ha provocado que el desánimo cunda ente los afectados. Reconoce que el Sepe está dentro del plazo permitido legalmente, pero razona que la agilización de los trámites debería haber propiciado el cobro para los trabajadores, que en algunos casos deben echar mano del apoyo de sus familias.
Además ayer, miembros del comité de Fal mantuvieron una reunión con representantes del Gobierno, entre los que se encontraban los consejeros de Empresa, Belinda León, y Hacienda, el arnedano Alfonso Domínguez, a los que solicitaron que complemente la parte de los salarios del Erte que no quede cubierta por el Fondo de Garantía Salarial (Fogasa) ante la pérdida de poder adquisitivo que van a afrontar durante un periodo que se puede prolongar dos años. «La reunión fue muy bien, la petición ha tenido muy buena aceptación», señala confiado Juan Pedro López, que explica que la pérdida salarial de media por trabajador oscila entre los 500 y los 600 euros. Según señala, el sueldo neto, en función de la categoría profesional, se sitúa entre los 1.600/1.700 euros, que se rebajan a alrededor de unos 1.100 con el Erte, una merma importante, que apelan al Gobierno que alivie. Al respecto, León, confirmó su disponibilidad a estudiar esta petición del comité, al tiempo que refrendó la opinión respecto al tono en el que transcurrió la reunión.
La consejera apuntó que el Ejecutivo «estudiará» la solicitud, ya que, argumentó, la cuantía, «cuando estás en un proceso de Erte, y más en este cuando va a haber una incorporación progresiva de trabajadores al nuevo proceso de fabricación», será variable. Así pues, espera conocer el número concreto de los afectados por el Erte para adoptar una decisión.