Quién no se ha puesto enfermo alguna vez cuando era niño? ¿O se ha caído mientras jugaba con sus amigos y se ha hecho alguna herida o algún esguince en el tobillo o en la muñeca? Cuando esto sucede, lo más común es acudir al servicio de urgencias pediátricas que tiene el Servicio Riojano de Salud (SERIS).
Los datos proporcionados por el servicio de urgencias pediátricas muestran que recibieron a 27.834 personas en el 2023, 2.166 menos que en el 2022. De esos, 27.300 acudieron al Hospital San Pedro y 534 fueron a el Carpa.
La jefa del servicio de Pediatría, Yolanda Ruiz del Prado, explica que uno de los motivos de esta bajada de niños y niñas atendidas es que «este pasado año se puso muy pronto a los recién nacidos y a los menores de seis meses la profilaxis de Virus Respiratorio Sincitial (VRS)». «Eso ha ayudado a que este pasado año haya habido menos ingresos», asegura.
En este punto, destaca que este servicio recibió muchos menos ingresos por bronquiolitis en 2023, «lo que ha hecho que sea más llevadero que en 2022». Reconoce que la media de consultas diarias que se han realizado en este servicio ha bajado «un poco» respecto a otros años, aún así, han acudido muchos niños, ya que «ha habido días en los que los profesionales sanitarios han atendido entre 150 y 160 consultas diarias, igual que el año pasado».
A pesar de estas cifras, Ruiz del Prado cuenta que el número de atenciones en urgencias pediátricas ha crecido mucho desde los años previos a la pandemia de la Covid-19. «Hasta 2018 y 2019 se veían 20.000 niños en urgencias, en 2020 bajó mucho por la pandemia y en el 2021 se empezó a recuperar, hasta los 30.000 de 2022 y los 27.834 de 2023», señala.
Explica que este aumento se debe a que la demanda de este servicio es cada vez mayor porque «antes se esperaba un poco más antes de ir a urgencias». Otro motivo es que las familias riojanas quieren que «se vea a sus hijos e hijas inmediatamente y si el cuadro médico persiste dos o tres días, vuelven a consultar».
«Hay mucha más demanda de atención y de asistencia a los niños, y para eso, la vía más rápida es acudir a las urgencias pediátricas», apunta. «No es que haya más patologías sino que hay más demandas de revisiones o de consultas con especialistas», añade.
Edad. La jefa de pediatría indica que la edad de los niños que pueden acudir a estas urgencias es de 0 a 14 años, tanto en el Hospital San Pedro como en el Carpa.
Detalla que los niños que más acudieron a los servicios de urgencias pediátricas fueron los que tenían entre 0 y 10 años. En concreto, hicieron uso de este servicio casi 12.000 niños que tenían entre 0 y 3 años; otros 10.000 que tenían entre 4 y 10 años; y otros 4.500 que tenían entre 11 y 14 años.
Cuenta que las causas por las que acuden estos niños y jóvenes son bastante variadas aunque siempre hay patologías que se repiten con frecuencia. Entre ellas, Ruiz del Prado informa que la causa más frecuente de estas consultas pediátricas son las infecciones. «Van cambiando un poco según la época del año pero sobre todo son procesos febriles, infecciones intestinales como gastroenteritis o infecciones respiratorias como la gripe, entre otras». Añade que en los meses de verano, los motivos por los que acuden más niños son diferentes, en concreto, caídas y traumatismos porque «pasan más tiempo al aire libre».