El sector del 'Rioja' afronta una vendimia de 2024, marcada por la incertidumbre de una coyuntura de caída del consumo del vino, y con un viñedo muy sano en el conjunto de la Denominación de Origen Calificada (DOCa Rioja), carente de enfermedades, para deparar unos vinos de gran calidad, si las condiciones meteorológicas no estropean el ciclo final.

Así lo han explicado a EFE el director técnico del Consejo Regulador de la DOCa) Rioja, Pablo Franco, y el director general de la bodega cooperativa Viñedos de Aldeanueva de Ebro, Abel Torres, quienes han coincidido en calificar de "extraordinario" el estado vegetativo que presenta la uva en el conjunto de la Denominación, que se extiende sobre 66.902 hectáreas repartidas entre La Rioja, País Vasco y Navarra.

Esta bodega cooperativa, la mayor de la DOCa Rioja con 3.000 hectáreas, es la que marca el comienzo de la vendimia en Rioja, e intensifica sus analíticas con la previsión de poder empezar la recogida de la uva blanca a partir de la semana del 19 de agosto.

Este año, las características del ciclo vegetativo han sido diferentes a las de la cosecha de 2023 y la vendimia comenzará con un retraso respecto al año anterior, cuando las uvas blancas comenzaron a recogerse el 10 de agosto, y este año será después y con un óptimo estado vegetativo que presenta el viñedo.

Torres ha precisado también que el impacto de la cuarta ola de calor, en este último fin de semana, podría modificar las fechas inicialmente previstas de comienzo de la recogida para no estropear el buen grado que ya presenta la uva blanca, lo que se determinará en una asamblea de sus 800 socios, convocada para mañana, martes.

En la misma línea se preparan viticultores y bodegas de la parte más oriental de la Denominación, donde también, en próximas fechas, comenzará la recogida de la uva blanca, aunque la tinta no se prevé que se recoja, en general, hasta principios de septiembre.

Menos carga productiva y de calidad. El viñedo también presenta este año un menor nivel productivo, con cepas con menos carga de uva, pero muy sana, lo que es "muy interesante" en el plano cualitativo porque los racimos están más sueltos y tienen menos riesgo de enfermedades, ha explicado Franco.

Ha precisado que lo que resta de ciclo es muy importante; y, al igual que ha detallado Abel Torres, hay que ver cómo el viñedo aguanta el calor de una manera "tan continua como se está viendo", aunque las temperaturas nocturnas han bajado y eso es "un factor relevante".

El Consejo Regulador también está comprobando la situación productiva de los viñedos de la Denominación, ha subrayado su director técnico, quien, sin adelantar previsiones cuantitativas de cosecha, ha incidido en que la cosecha será inferior que la de 2023, que culminó con 377 millones de kilos de uva amparables, para elaborar 259,5 millones de litros de vino.

Otra de las razones que determinarán este año una menor cosecha amparable, es la aplicación de la cosecha en verde, por la cual en el entorno de las 7.000 hectáreas no se van a vendimiar en concepto de diferente ayuda, ha informado Franco.

Respecto a las normas de campaña, permiten, como el pasado año, amparar el 90% del rendimiento para uvas tintas -5.850 kilos por hectárea; y el 100 % para blancas (9.000 por hectárea); y, como novedad, destinar a destilación el exceso de producción, ha indicado.

También se mantiene el rendimiento de transformación amparable del 69 % en el caso de uva tinta y del 70 % en el de la uva blanca destinada a la elaboración de vino blanco.

Inteligencia Artificial para consultar expectativas de cosecha. Además, por primera vez, el Consejo Regulador ha implantado este un mecanismo basado en Inteligencia Artificial, que permite al viticultor la consulta telemática de las expectativas de producción de su viñedo, que ya ha comenzado a implantarse en la zona de Rioja Oriental, con bastante buena aceptación, ha indicado Franco, por parte de los inscritos.

El próximo día 19, el Consejo Regulador también tiene previsto comenzar a difundir sus boletines de maduración de la uva, que son una ayuda al viticultor para determinar el momento óptimo de vendimia.

El Consejo Regulador también ha comunicado a los inscritos aquellas parcelas que cree que tienen producciones elevadas, a fin de que hagan sus trabajos de ajuste, además de que intensificará las medidas de control a fin de asegurar que se garantice la máxima calidad de los vinos amparados y comercializados, ha detallado Franco.

Sobre la incertidumbre que vive el sector por la caída de las ventas del vino, que es general, en todas las regiones, Franco ha destacado que desde el Consejo Regulador el valora el esfuerzo de los viticultores por cultivar sus viñas y mantenerlas en "muy buenas condiciones" en momentos también, de baja rentabilidad, y también de las bodegas por vender el vino.