Óscar Martínez Solozábal, presidente de la Asociación Profesional de Expertos Inmobiliarios,no muestra su extrañeza por la estadística notarial y confirma que el volumen de ventas se ha incrementado en cifras elevadas en un contexto en el que la demanda supera la oferta, debido, principalmente, a la escasez de vivienda nueva «porque no se construye como se debería», además de que el mercado de segunda mano no avanza parejo a la necesidades del mercado.

Atribuye el alza a varios factores, como una acumulación de demanda, es espera de la caída de los precios -que no considera probable-, la llegada de ciudadanos de otros países, que necesitan vivienda, además de la bajada de los tipos de intereses que, apunta, beneficia principalmente a quien ya hace frente a una hipoteca.

Señala que el mundo inmobiliario «es muy miedoso», y cuanto más suben las ventas, mayor es el interés en nuevas adquisiciones porque la impresión general es que se va a producir una alza en los precios y «cuanto más se vende, más sube el precio», un encarecimiento que también favorece la limitada oferta. Reconoce que se encadenan tres años de incremento de las cantidades que hay que desembolsar para adquirir una vivienda -este año ha sido el mayor-, un incremento que considera coherente  con el ascenso general de las materias primas  y los profesionales y, consecuentemente, de la obra nueva e incluso la segunda mano, que se acerca en precios a la primera.

Martínez Solozábal, no obstante, advierte de las oscilaciones de un mercado volátil, aunque prevé que no bajarán las necesidades ante la falta de nuevas promociones. «Llevamos años oyendo que se van a construir nuevas viviendas, y eso no se está produciendo», apunta Martínez Solozábal, que constata  las dificultades que afronta el alquiler, escaso y a precios muy elevados, lo que ha conducido a un nutrido grupo de inquilinos a convertirse en inquilinos «porque han pensado que con lo que pagan de alquiler se compran un piso».

Escéptico con el anuncio de Pedro Sánchez de crear una empresa pública de vivienda, «las competencias las tienen las comunidades», el gerente de Iregua considera necesario que los ayuntamientos «suelten» suelo, aunque no lo contempla como una solución a corto plazo «porque necesitamos pisos ya». Para ello, solicita medidas para facilitar la puesta en el mercado viviendas vacías, «ayudando a los propietarios, otorgándoles seguridad jurídica»