La Unión Deportiva Logroñés se la juega este domingo (Las Gaunas, 18 horas) y eso se nota. Natxo González compareció en rueda de prensa y lo hizo para confirmar que, a falta de dos entrenamientos (el de hoy viernes y el de mañana sábado), no tiene delanteros disponibles. Como informamos el jueves, Clau Mendes está sancionado y Viní Tanque y Schutte arrastran molestias (en la rodilla el brasileño y en el tobillo el portugués). No están descartados pero son seria duda. En su ausencia, el técnico vitoriano tendrá que recurrir bien a un rombo de los más pequeños (Zourdina, Doncel y Menudo) o bien a los atacantes del filial, que seis horas antes en el Mundial tienen también otra 'final'. Cristian Fernández y Pichín son baja si bien el extremo podría reaparecer en la Nova Creu Alta.
El encuentro ante el Murcia sabe a partido de inflexión y se nota. El técnico acabó su intervención ante los medios reivindicando la profesionalidad de sus jugadores y lamentando que, jornada tras jornada, el domingo les niega el fruto del día a día. Se reivindicó y lo hizo sin alzar la voz. Nunca antes sonó tan convincente pese a que arrastra una losa muy pesada: once jornadas sin ganar.
"No nos tachéis de otra cosa. Seré malo, prepotente o lo que queráis decir pero hasta el último día me dejaré la piel", defendió el preparador vitoriano. "No seáis injustos", continuó a preguntas durante su intervención ante los medios. "También somos personas. Estamos haciendo todo lo posible por salir. No puedo defender los resultados pero si el trabajo. Con eso no se puede meter nadie. Estamos sufriendo", destacó un entrenador que sabe que pese a las buenas sensaciones que se transmiten en el Mundial, éstas no se traducen cada domingo. "No nos falta ganas, trabajo y profesionalidad", aseguró.
"Estoy muy agradecido a Sergio (Rodríguez), Dupi y Félix (Revuelta) por estar aquí", adujo con anterioridad aunque "sé que los resultados no los puedo defender: están ahí y son objetivos". "Pero nadie me puede achacar que no lo esté dando todo", defendió al tiempo que recordó que, pese al contrato de año y medio que le liga a la entidad, no es un advenedizo porque "siento que este es mi sitio"
"El día a día es bueno" pero los resultados no llegan y, como la sucesión de catorce encuentros sin ganar tiene difícil explicación asume que esta mal fario es fruto de muchas cosas entre las que figuran "la presión, los miedos...". "Te haces pequeño y no llegan. La vida en general es así. Es lo que nos pasa. Tenemos esa mochila encima que pesa. Esto es el fútbol", apuntó un técnico que se encuentra en su enésima encrucijada como técnico blanquirrojo y lo hace sin delanteros a los que agarrarse frente al cuarto clasificado de la tabla, un Real Murcia que también quiere reivindicarse. "Seguro que una victoria nos va a liberar", aunque ésta, semana tras semana, se demora.