Cuando el pasado verano Marco Asensio puso rumbo hacia París, el Real Madrid dijo adiós a una cifra superior a la decena de goles asegurada por temporada. El balear, habitualmente discutido y 'jugador número 12' en las últimas campañas en el Bernabéu, se despidió del feudo blanco buscando más de lo que en Chamartín obtenía, a pesar de que con los merengues, curso tras curso, siempre cumplía fielmente. Ahora, Brahim Díaz, que ha aprovechado las lesiones de compañeros en el flanco ofensivo para reclamar un sitio, aparece como el 'sustituto' del jugador del PSG después de demostrar una gran relación con la portería contraria en las últimas fechas.
Tras la salida de Cristiano Ronaldo, el Madrid buscó con ahínco un 'nueve' que tenía en casa. Karim Benzema se destapó como ese 'killer' que todo conjunto grande necesita y, además, Vinícius terminó de salir del cascarón tras la llegada de Carlo Ancelotti. Sin embargo, en la 'casa blanca' siempre hace falta un fondo de armario consistente, y el reflejo fiel de esto era Asensio. En las últimas tres temporadas, mientras sus minutos iban decreciendo paulatinamente (pasó de 2.614 en la 20/21, a 2.136 en la 21/22, hasta los 1.996 de la última campaña), su acierto goleador y contribución al equipo no paraba de crecer. El mallorquín solo hizo siete tantos en la 20/21, pero en sus dos últimos cursos en el Bernabéu sobrepasó la decena de dianas, con 12 tantos en la 21/22 como en la 22/23.
Sin su figura, que ha pasado también al ostracismo al amparo de Luis Enrique en un Paris Saint-Germain que presenta en la línea ofensiva a la flor y nata de los delanteros del Viejo Continente, Ancelotti recurrió a un antiguo canterano que se encontraba en el Milan, ese equipo del que el italiano es una leyenda y al que llevó a lo máximo tanto como jugador como desde el banquillo.
Brahim aterrizó en el Real Madrid, pero hasta hace nada esperaba su turno en el banquillo. Como el propio técnico transalpino reconoció, su trabajo silencioso y regular se ha visto recompensado en las últimas fechas por la plaga de lesiones que presenta el combinado merengue. Apareció de titular ante Las Palmas (2-0), marcó. Lo hizo también contra el Braga (3-0) en Champions, marcó. También fue de la partida frente al Granada (2-0) el pasado fin de semana, marcó.
La regularidad del español recuerda a la de Asensio, tan importante como para ser el primer relevo de las estrellas cuando el partido se atasca, pero lo suficientemente prescindible como para no tirar abajo la puerta de la titularidad. Ancelotti es un preparador que suele tocar poco a su equipo habitual, pero Brahim se está presentando para ser su 'jugador número 12'.