La hija del profesor encontrado muerto en su domicilio el pasado 18 de febrero de 2020 en su domicilio de Logroño ha destacado esta mañana la "buena relación" familiar que mantenía con su padre, "muy cercana", y diaria y aún así "no sabía que tenía ningún tipo de relación" con la acusada. "Siempre nos contaba la dinámica de su día a día, teníamos una relación muy cercana, tanto con mi madre como con mi hermano, pero no nos contó ni que le había dejado dinero ni que tuviera una relación con ella", informa Europa Press.
Además, explica que días después del suceso, la familia pudo subir al domicilio del profesor, situado en la calle Pepe Blanco de Logroño -custodiados por la Policía- "para ver si faltaba algo. Sí que había dos cajones abiertos pero a la vista había dinero, unos 300 euros, pero no se lo habían llevado. Había cosas que no te tenías que esforzar mucho para verlas".
En su declaración ha querido dejar claro que "a nadie de la familia nos manifestó que tenía ningún tipo de relación con la acusada".
Este martes ha continuado el juicio por el conocido como 'crimen del profesor' contra dos personas acusadas -hombre y mujer- de diferentes delitos de obstrucción a la justicia, homicidio y encubrimiento. Según el escrito del Fiscal, presuntamente ambos, en connivencia, perpetraron un plan que culminó con la muerte del profesor en su domicilio.
Ese día, el acusado acudió a la vivienda de la víctima -de 73 años- para evitar el proceso judicial que el docente tenía con la otra procesada por estafa ya que éste le dejó 54.000 euros que no le devolvía. Según relató la mujer acusada ayer en la primera sesión del juicio, ésta mantenía una relación sentimental simultánea con el acusado pero también con la víctima aunque "no se conocían entre ellos".
Una vez en su domicilio, según el escrito del Fiscal, el procesado intentó coaccionar al profesor y tras discutir con él, le golpeó "con un objeto contundente" que acabó con su vida. Tras los hechos, el hombre acusado "desapareció de Logroño" y fue encontrado en Italia. La mujer, por su parte y según declaró ayer ante el Juez, se encontraba en Madrid el día de los hechos.
"MI MADRE SE ALARMÓ PORQUE NO LE COGÍA EL TELÉFONO"
Por su parte, la hija ha explicado que el día de los hechos "mi padre había quedado con mi madre para hacer unas gestiones pero, a lo largo del día, mi madre se alarmó porque no le cogía el teléfono". Como ha indicado "a pesar de que estaban separados, tenían una relación muy buena, éramos una familia normalizada y celebrábamos todo juntos, estábamos siempre en los momentos buenos y malos juntos. Nos apoyábamos".
"Cuando salí de trabajar y al decir mi madre que no le cogía el teléfono, le llamé muchas veces y al ver que no nos cogía el teléfono decidimos acercarnos a su domicilio. Llamamos al timbre, abajo, nadie nos cogía, subimos arriba y como llevábamos la copia de la llave de su casa decidimos entrar y lo encontramos muerto".
Como ha destacado sí que les sorprendió que la puerta "no estuviera cerrada con llave. Mi padre siempre cerraba con dos vueltas. Mi padre llevaba una vida normal, tranquila, sí que dio un bajón físico importante en los últimos años pero estaba bien".
Sobre la vida personal de su padre y sus movimientos de cuentas bancarias explica que "nosotros no notamos nada, no sabíamos nada de que tuviera relación con la acusada ni que le había dejado dinero".
Niega la hija que en los momentos de los hechos diera masajes "ya estaba un poco deteriorado de salud, la habitación la seguía teniendo pero no la usaba. Siempre hacía masajes a personas de confianza y conocidas". Además -ha añadido "mi padre era muy sencillo a la hora de vestir y a la hora de vivir".
Volviendo al día de los hechos, recuerda, "en cuanto mi madre abrió la puerta vi un charco enorme de sangre y a mi padre tendido en el suelo. Pensé que era un accidente doméstico, quién iba a pensar otra cosa".
En esos momentos "llamamos al 112 y nos mandaron a una uvi móvil. Una vez llegaron los médicos y certificaron su muerte, por protocolo, ellos llamaron a la Policía porque habían visto algo que no les cuadraba".
PENAS
En concreto, el Fiscal solicita 14 años de cárcel para el hombre por el delito de asesinato y otros dos más por el de obstrucción a la justicia. Además, el principal acusado -el presunto autor material del crimen- deberá indemnizar a la familia de la víctima (exmujer y dos hijos) con 300.000 euros. Por su parte, para la mujer, la Fiscalía pide dos años de cárcel por obstrucción a la justicia y otros dos años y seis meses por el delito de encubrimiento.
Por parte de la Acusación Particular -que defiende los intereses de los familiares del fallecido- piden cárcel por homicidio o asesinato a ambos acusados (entre 15 y 25 años) además de una indemnización de 150.000 euros para cada uno de los dos hijos del profesor fallecido.