María de la Fuente Grijalvo es una residente de Neumología de cuarto año que cuenta que sus principales labores incluyen pasar consulta; atender pacientes en planta, tanto convencional como en la UCRI); y ocasionalmente supervisar residentes de años inferiores de otras especialidades.
«Hoy en día no tengo un plan de formación establecido como en años anteriores, algo que echo en falta», apunta esta burgalesa.
Califica su experiencia laboral como «muy positiva» porque «he recibido un excelente apoyo profesional y educativo por parte, tanto de los médicos adjuntos de mi servicio como los de otros». También ha contado con el apoyo de otros médicos adjuntos de hospitales en los que he realizado rotaciones externas, «lo que ha superado mis expectativas», añade.
Destaca que ahora se siente «más segura y competente» en su práctica médica en comparación con cuando empezó como residente de primer año. «He adquirido más conocimientos y habilidades a lo largo de mi residencia sin ninguna duda», remarca.
De hecho, asegura que ha mejorado en la atención integral de los pacientes y a la hora de poder establecer relaciones de confianza con ellos. «Aunque siempre hay margen de mejora, especialmente en áreas como la gestión del tiempo, pero supongo que esto lo mejoraré con la experiencia y la comunicación», indica.
Por otro lado, De la Fuente revela que tiene muchos sueños, comoser una docente referente en el área de la Neumología.