Con motivo del Día Internacional del Cáncer Infantil, FARO, como miembro de la Federación Española de Padres de niños con cáncer (FEPNC), organiza hoy su tradicional acto a las 11:00 h. en la CEIP Bretón de los Herreros en el que escolares, profesores y políticos darán visibilidad a una realidad que afecta a 1.500 menores en España.
El objetivo de este acto es implementar el seguimiento a los supervivientes del cáncer pediátrico para que esta población disponga de un mecanismo y vigilancia sobre su estado de salud, y un afrontamiento de secuelas a largo plazo.
Según los datos que maneja la FEPNC, el 75 % de los supervivientes experimenta alguna secuela tardía y el 25 % de esas secuelas son severas o potencialmente mortales. «Unos datos preocupantes si se tiene en cuenta que, en la actualidad, solo en 9 hospitales de los 36 en los que interviene su movimiento asociativo aplican este programa. Esto supone que solamente se lleva a cabo en el 25 % de los centros hospitalarios», apuntan.
Además, el 58 % de estos centros siguen sin dar cobertura a las necesidades específicas que presenta una población que tiene una biología tumoral distinta al cáncer en adultos y que está sujeta a riesgos potenciales para su salud derivados de las secuelas de la enfermedad o tratamiento. «Y el resto de centros, pese a que lo aplica, lo hace de forma incompleta», critican.
FARO también denuncia que La Rioja no cuenta con una Unidad de oncología pediátrica por lo que nuestros menores diagnosticado de cáncer son derivados a hospitales de referencia. Por ese motivo, FARO trabaja para establecer una coordinación con el sistema riojano de salud que permita a las familias acudir en momentos puntuales, y si fuera necesario al hospital San Pedro. «Se busca usar sus recursos y que su personal conozcan el historial médico del menor para puedan atenderle adecuadamente, dando a las familias la seguridad de una atención de calidad», solicitan fuentes de la asociación.
Derecho al olvido. La FEPNC reclamó el pasado año el derecho al olvido, es decir, que las personas que han sufrido un cáncer infantil, no conste en su expediente cuando tengan que pedir un seguro médico, una hipoteca o a la hora de tener derechos laborales.
FARO apunta que el real decreto-ley aprobado el pasado 2023 establece el derecho al olvido oncológico de los pacientes de patologías oncológicas una vez transcurridos 5 años desde la finalización del tratamiento sin recaída.
Asegura que los supervivientes de cáncer se enfrentaban a aumentos de primas por parte de las aseguradoras, denegación y rechazo de hipotecas, ausencia de respuesta por parte de las entidades o discriminación a la hora de postularse a puestos de trabajo.