El Hospital de Día del Servicio Riojano de Salud, integrado en el Hospital San Pedro de Logroño, cuenta con un nuevo servicio desde hace apenas menos de un mes. Una consulta de enfermería oncológica que tiene como objetivo dar cobertura a los pacientes que empiezan la quimio por primera vez, sobre todo para aquellos que es necesario darles una asistencia más personal, ya que se generan muchas dudas y problemas.

La enfermera que está en la consulta, Rita Castroviejo, informa que han realizado unas 70 consultas en apenas 20 días. «Más de 40 han sido telefónicas y más de 20 han sido presenciales, en las que han venido personas en su primer día, y otras que venían a ponerse la quimio pero te cuentan que tienen un problema o dudas», detalla.

Esta consulta tiene un funcionamiento muy concreto. Castroviejo explica que el paciente primero es atendido por las doctoras en las consultas, así que «ese primer día procuramos no hacer la visita con el paciente porque salen con mucha información y para ellos es demasiado volver a recibir más información». «Lo que hacemos es citarlos antes de que entren a la sala a ponerse el tratamiento», indica.

La jefa de Oncología, Martina Alonso, detalla que cuando los pacientes van a la consulta «de primer día» reciben un impacto importante que «hace que se bloqueen». Los profesionales médicos de esa consulta dan información pero «nos damos cuenta de que muchas veces ocurre que el paciente no se queda con ella porque continúan con un shock que les bloquea, e incluso tienen la mirada perdida». Por eso, destaca la importancia de esta consulta, ya que «asegura que el paciente esté bien informado, además de que se busca la calidad».

En este punto, la supervisora de enfermería de Hospital de Día, Inmaculada Marco, añade que esta consulta ayuda a  «minimizar los efectos secundarios y que el paciente tenga la mayor calidad de vida posible durante este periodo de tiempo». 

Además, Castroviejo informa que esta consulta también ofrece cuidados. «Los que tienen catéter vienen a revisarlo y a cuidarlo porque es la vía por la que nosotros ponemos los tratamientos», explica.

Por otro lado, estas profesionales médicas subrayan las buenas sensaciones que les transmiten los pacientes que acuden a la consulta. «La respuesta es muy buena, son súper agradecidos», señala Castroviejo.

Alonso describe al paciente oncológico como una persona agradecida porque «ve que tiene atención muy continuada. Tiene que venir muchas veces y les acabamos conociendo aspectos de su familia y de su trabajo». De hecho, resalta que todo está  lleno de agradecimientos en las paredes escritos en notas y tarjetas.

Marco, por su parte, apunta que el paciente oncológico requiere la atención de muchos equipos. «Hay que hacer un abordaje multidisciplinar y se necesita un punto de referencia. De esta forma, esta consulta sabe a quien llamar», indica.

Perfil. La enfermera del Hospital de día, Rita Castroviejo, señala que el perfil de los pacientes oncológicos suele ser de una persona mayor aunque «también hay jóvenes». La cuestión, apunta Alonso, es que el paciente mayor se entera menos de lo que sucede con esta enfermedad, mientras que «los jóvenes están más informados»

Marco critica que hay personas que buscan la información en buscadores como Google pero «esta forma de hacer las cosas no es la adecuada».

El 75% de los pacientes del Hospital de Día son oncológicos y el resto tienen otras patologías. «Estamos empezando a funcionar con los pacientes que requieren más cuidados por los efectos secundarios de la quimio o porque tienen muchas dudas», indica Marco.