Con más de 22,2 millones de españoles con póliza, el 46%, casi la mitad de la población, tiene suscrito un seguro de decesos, uno de los más extendidos del país, junto con el de vida y automóvil. A las puertas del Día de Todos los Santos, Estamos Seguros, la iniciativa de divulgación de Unespa, la patronal del seguro, ha hecho público el informe Los seguros de decesos en España. Datos 2023, que constata que las cifras de aseguramiento se mantienen estables desde 2012.
El informe señala que el elemento más llamativo del seguro de decesos es su universalidad y, si bien su presencia puede cambiar de acuerdo con determinados factores, es muy significativa en casi todos los territorios. Sin perjuicio de ello, las variaciones provinciales son muy acusadas y oscilan desde cerca del 80% de la población de Cádiz, el 76% de los residentes de Ávila o los 73% de Badajoz, a territorios donde su presencia es menos destacada, como el 17% de Melilla, el 19% de Soria, el 20% de Teruel o el 21% de Huesca.
Por lo que respecta a La Rioja, el seguro de decesos no tiene una penetración muy notable, aunque cerca de tres de cada diez ciudadanos, el 28,9, tienen suscrito uno.
El estudio de Estamos Seguros asegura que las pólizas de decesos tienen una aceptación destacada tanto en los pueblos como en las ciudades y señala que, si se tiene en cuenta el tamaño de los municipios, hay una prevalencia por los hogares que gastan en seguro de decesos situados en poblaciones grandes; pero, por debajo del primer nivel, -desde pequeños pueblos hasta municipios de tamaño medio- no parece haber grandes diferencias. Al respecto, Maite Orío, del Tanatorio San José, ratifica este argumento e indica que el número de personas aseguradas es notable, tanto en Logroño como en Calahorra.
La tasa de personas a las que da cobertura se ha mantenido prácticamente estable en 2023, Cuenca, con el 4,8% fue la provincia que mayor incremento experimentó, por delante del 2,5% de Teruel o 1,6% de Huesca y Guadalajara. Pero también ha habido retrocesos, como en el caso de La Rioja, donde son 487 personas menos las aseguradas, con una caída del 0,51%. La mayor caída se ha producido en Orense, -2,30, Asturias, -1,14% y el -0,84 de Cáceres.
Desde 2012, las variaciones han sido escasas y en La Rioja la evolución media anual ha sido de una subida del 0,68%. Yes que los únicos hogares donde el seguro de decesos cuenta con una presencia muy reducida son aquellos en los que vive una persona sola que tiene menos de 30 años. Eso sí, los hogares donde hay personas de más de 65 años al frente son los que tienen mayores tasas de contratación, aunque las diferencias son pocas frente a algunas agrupaciones familiares donde hay jóvenes conviviendo.
Padres e hijos. El seguro puede suscribirse como prima única o abonarse a lo largo de los años; en el momento del fallecimiento la compañía se hace cargo de los servicios que se contemplen en la póliza.
Maite Orío confirma que hay un importante volumen de asegurados entre gente de mayor edad y apunta que ha sido habitual que los padres que contaban con póliza aseguraran a sus hijos. La representante de San José, que se encarga de prestar los servicios funerarios, señala que los estos ya vienen indicados en la póliza suscrita, de enterramiento, incineración, coronas de flores o si se prefiere un centro. Al respecto, señala que las compañías de seguros se van adaptando a las nuevas necesidades, como es el caso de la cremación o la sala del tanatorio. Confirma que hay un amplio número de ciudadanos asegurados para hacer frente a un servicio funerario, cuyo precio de incineración se sitúa en unos 1.800 euros, aunque la cuantía es muy variable en función de las prestaciones que se requieran, en función de aspectos como costumbres o creencias.