La Guardia Civil ha detenido a dos personas por seis delitos de estafa en comercios de La Rioja cometidos mediante el conocido como "hurto mágico", cuyo fin es engañar a los empleados con el cambio.

Los detenidos compraban productos de poco valor con billetes de 100 y 200 euros, para después confundir a los trabajadores con las vueltas, ha informado este domingo la Guardia Civil en una nota.

La investigación se inició tras la presentación de varias denuncias por parte de las víctimas de esta estafa, que presuntamente fue cometida por las mismas personas, porque coincidía su descripción física.

Los agentes activaron un dispositivo de búsqueda para localizar a los autores, que viajaban en un vehículo y operaban por toda la comunidad autónoma de La Rioja.

Durante las actuaciones, un comerciante alertó a la Guardia Civil después que estas dos mismas personas intentasen estafarle con el método del "hurto mágico".

Inmediatamente se activó un dispositivo de localización, que permitió a los guardias civiles interceptar el vehículo en el que los sospechosos huían tras intentar cometer su última estafa.

El "hurto mágico" es una técnica de estafa que se basa en confundir al trabajador de un negocio durante el proceso de pago.

Los delincuentes adquieren productos de bajo coste, generalmente inferior a 10 euros, pagan con un billete grande y cuando el estafador recibe el cambio, aprovecha para esconder parte del dinero, devuelve el objeto adquirido y después pide la devolución del billete entregado.

Este tipo de estafa genera dudas al trabajador sobre si ha dado el cambio correctamente.

Para aumentar la confusión, el estafador suele contar con la colaboración de un "gancho" en el local, una persona que respalda su versión de los hechos, lo que confunde aún más al empleado.

La Guardia Civil recomienda que los responsables de los negocios presten especial atención durante los cobros y que desconfíen de pagos con billetes de gran valor para productos de bajo coste, sobre todo si los clientes no son habituales.

Además, al realizar el cambio, es aconsejable hacerlo de forma pausada y comentada con el comprador, para evitar que pueda reclamar posteriormente cualquier error.