Cinco orejas en la primera tarde de la feria matea

Luis Ruiz
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Sergio Domínguez y Guillermo Hermoso pasean dos trofeos cada uno y Pablo Hermoso de Mendoza logra también un apéndice

El calagurritano Sergio Domínguez, con el segundo de la tarde al que cortó una oreja. - Foto: Raquel Manzanares (Efe)

Dos orejas cada uno han paseado los rejoneadores Sergio Domínguez y Guillermo Hermoso de Mendoza en el festejo ecuestre que ha abierto este domingo la feria de San Mateo de Logroño, en el que el primer actuante, Pablo Hermoso de Mendoza, ha logrado también un apéndice.

Abrió la tarde Pablo Hermoso de Mendoza, que llevó a cabo una faena muy pulcra a un primero de corrida noble y colaborador al que ya paró de manera magistral sobre Alquimista. Con Berlín comenzó a calentar el ambiente con dos banderillas, galopes a dos pistas y sus ya habituales hermosinas.

Con Navegante firmó dos quiebros extraordinarios en los medios dejándose llegar mucho al de Bohórquez, y con Nilton, una montura nueva, epilogó con dos cortas. Tenía el triunfo en la mano pero el mal uso de los aceros definitivos dejó todo en silencio.

Sí tocó pelo en veterano jinete navarro del cuarto, un toro de escaso celo al que volvió a parar con Alquimista para empezar a encandilar los tendidos montando a Navegante, con el que mostró la pureza de su toreo pegando auténticos muletazos con la grupa, amén de unos quiebros de inmaculada ejecución.

Con Malbec mantuvo el buen ritmo de la faena con vistosas piruetas en una labor en la que a punto estuvo de sufrir un percance de no ser a que el toro perdió las manos en un momento de apuro. Finalizó con dos cortas y, tras un pinchazo y rejón a dos tiempos, paseó una oreja.

El local Sergio Domínguez cortó la primera oreja de la feria a un animal soso y parado, que protestaba y pegaba oleadas a la mínima que sentía el hierro, y con el que el de Calahorra anduvo muy entregado, poniendo todo de su parte para argumentar su labor.

Paró al toro sobre Esférico, logrando los mejores momentos de su actuación sobre Olé, clavando siempre al pitón contrario, muy certero en dos banderillas, y también con Litri, con el que colocó un gran par a dos manos y dos cortas. El descabello posterior al rejón final no fue óbice para que paseara el mencionado trofeo.

Otra oreja más paseó el riojano del sosito quinto, un toro sin entrega con el que sacó hasta cinco monturas: Con Litri lo recibió para ir ahormando al animal, y con Olé volvió a exponer mucho en dos banderillas de mucho riesgo.

Lo más lucido llegó montando a Natural, con el que Domínguez dejó pasajes vistosos en los preparativos y salida de las suertes que gustaron al público de Logroño. Con Pantera también lució en banderillas para finiquitar su actuación sobre Quilate.

Guillermo Hermoso de Mendoza cortó una oreja del tercero merced a una faena muy medida, sin ningún tiempo muerto y de gran conexión con los tendidos, y en la que rayó a un gran nivel en todos los tercios.

Con Jíbaro ya mostró el gran sentido del temple que tiene el joven navarro, midiendo muy bien la embestida de un toro con fijeza pero bajito de raza. Con Extraño se lució en los previos de un notable tercio de banderillas, donde clavó certero y reunido; y con Esencial puso un par de cortas a dos manos sensacional. Pinchó antes del rejón final y, así y todo, logró un apéndice de ley.

Lo mejor de la tarde llegó al final, también porque el sexto fue el toro más completo y de mejor con del envío. Guillermo Hermoso, que lo recibió en la misma puerta de toriles con Jíbaro, comenzó a caldear el cotarro con quiebros de gran espectacularidad y tres soberbias banderillas con Ecuador.

Con Berlín llegó el apoteosis, con unos milimétricos galopes de costados y con Esencial puso fin a su labor con otro par de cortas a dos manos impecable. Lástima que pinchara antes del rejón definitivo, pues aunque le pidieron las dos orejas que le habrían abierto la Puerta Grande, el palco dejó el premio en singular.

FICHA DEL FESTEJO

Seis toros reglamentariamente despuntados para rejones de Fermín Bohórquez, de dispar comportamiento. El mejor, el sexto; también se dejó el noble y colaborador primero; parado y a la defensiva el segundo; y bajitos de raza y sosos, tercero, cuarto y quinto.

Pablo Hermoso de Mendoza, de rondeño con chaquetilla azul e hilo blanco: dos pinchazos, rejón y descabello (silencio); pinchazo y rejón en dos tiempos (oreja)

Sergio Domínguez, con chaquetilla gris: rejón y descabello (oreja); rejón (oreja).

Guillermo Hermoso de Mendoza, con chaquetilla azul: pinchazo y rejón (oreja); pinchazo y rejón (oreja con petición de la segunda).

La plaza registró un tercio de entrada.