¿Cuánto trabaja el profesorado? Una cuestión que da título a un informe elaborado por el área de Enseñanza de Comisiones Obreras y que trata de avalar la queja constante de los docentes y apagar las críticas externas sobre el horario en las aulas. Y precisamente, la central sindical observa en su estudio por comunidades autónomas y relativo al presente curso 2024-2025, una dedicación que excede, y con creces, de las horas semanales a las que están sujetos los funcionarios y los empleados públicos en general en el ámbito de la docencia.
Por un lado, en su objetivo de dejar atrás la teoría y descender a la realidad en los centros educativos, el sindicato mide los grupos y el alumnado por profesor. En el caso concreto de La Rioja, cada docente de Infantil y Primaria asume clases de 2,45 grupos (un profesor puede dar horas de docencia en diferentes grupos). Una tasa que se eleva hasta 4,56 grupos en las aulas de Secundaria. Así, en el caso de los CEIP, la tasa riojana es de las más reducidas del conjunto del país y se sitúa por debajo de la media. Ahora bien, en los IES asciende por encima de la media y se coloca entre las más elevadas.
De esta forma, cada profesor de Infantil y Primaria asume un total de 42,93 alumnos mientras que uno de Secundaria debe hacerse cargo de 84,47 estudiantes. Todo ello se basa en ponderaciones teniendo en cuenta que centros del medio rural soportan una carga docente considerablemente más reducida que en colegios ubicados en grandes núcleos de población.
En cuanto al horario, coinciden solo en parte los datos reflejados en el estudio del área de Enseñanza de CCOO con los facilitados por la consejería de Educación y que han entrado en vigor a lo largo de este curso. Sin embargo el sindicato trata de tomar la fotografía real que poco o nada se ajusta a la normativa. Así, y en el caso de Infantil y Primaria, contabiliza 23 horas lectivas, 4 exclusivas (reuniones de equipos docentes, coordinación, reuniones con familias...), otras 2 de trabajo administrativo y otras 2 para preparación de las clases. A todo ello, Comisiones suma otros tres escenarios posibles para la atención personalizada por alumno para elaboración de diferentes informes, entre otras cuestiones. Plantea así una variación de atención a alumnos de 10, 12 y 15 minutos por estudiante. De esta forma, calcula que de media un docente de Infantil y Primaria dedica entre 39,2 y 42,7 horas a la semana a su trabajo profesional. Muy por encima de lo establecido teniendo en cuenta que en este cómputo entran también las horas de libre disposición que se pueden realizar en casa, o en cualquier caso, fuera del centro educativo.
Sin embargo, la radiografía arroja, si cabe, una situación más acentuada en las aulas de Secundaria, según el infrorme del área de Enseñanza de la central sindical. Salvando las diferencias del reparto de horas (18 lectivas, 3 de guardia, 3 de reuniones, 2 de trabajo administrativo y 2 de preparación de clases), la atención personalizada requiere, en base a los datos reflejados por Comisiones, unos tiempos de atención personalizada más extensos. Así, el informe establece de nuevo la horquilla de 10, 12 y 15 minutos con lo que el horario semanal se dispara a 42,08 horas en el mejor de los escenarios, y hasta 49,1 en la peor de las situaciones.
Hay que tener en cuenta que los docentes disponen de 30 horas semanales de permanencia en los centros educativos más siete horas y media de libre disposición que «en ningún caso son suficientes -señala CCOO- para asumir las tareas mínimas que debe desarrollar cada docente». Dicho de otra forma, «una situación alarmante», indica el estudio.
Personal y ratios. Todo ello dibuja, a juicio de la centra sindical, un panorama insuficiente en cuanto a personal y a ratios. Mientras tanto, se registra, siempre en base a los datos proyectados por CCOO, un 39,2% de interinidad. Al inicio del presente curso escolar, había, tal y como recoge el informe, 3.064 profesores funcionarios de carrera, 1.974 funcionarios interino en docencia, lo que arroja casi un 40% de interinidad. De cumplirse la normativa, se establecería en un 8% lo que a su vez, se traduciría en 403 profesores interinos.
«El profesor tiene derecho a planificar su vida y no estar un año en Cervera y otro en Haro»
Pedro Antolín, secretario de la Federación de Enseñanza de Comisiones Obreras en La Rioja, considera el informe «una fotografía correcta» de la situación docente en el ámbito de la Comunidad autónoma y, en general, en toda España. Refleja, a su juicio, «la teoría versus la práctica». El personal docente tiene actualmente «una burocracia que supone un carga exagerada. Hay -prosigue- que realizar informes individualizados por alumnos de orientación, si se abre un expediente...».
Un trabajo al que evidentemente se suma la corrección de exámenes, la preparación de las clases, la evaluación y la valoración, entre otras cuestiones.
Mientras tanto, critica a la Administración ya que se establece «una tasa de reposición del 120% en lugar de sacar todas las plazas que se necesitan». Dicho de otra forma, si durante un curso lectivo «se jubilan cien profesores, se sacan 120 plazas en lugar de abordar las necesidades reales», tal y como apunta Antolín.
Hay que tener en cuenta en este sentido que la tasa de interinidad «se encuentra cerca del 40% en La Rioja», apostilla el secretario de la Federación de Enseñanza de CCOO en La Rioja. «Son profesores -continúa- que también tienen derecho a una planificación de vida y sin embargo, un año están en Cervera, otro en Cenicero..», señala el secretario de Enseñanza a modo de ejemplo.
La situación en fp. Todo ello analizando la educación de Infantil y Primaria y de Secundaria. Si se analiza la Formación Profesional, «hay especialidades en las que la interinidad supera el 90%». Se refiere así a profesores de informática o mecanizado, de nuevo a modo de ejemplo.
Considera Antolín que hay que dirigir los esfuerzos a «hacer la docencia atractiva y no solo con mejoras salariales, que también». Ve necesario trabajar para que «el profesorado no se queme y resalzar la figura del docente». Es algo que, a su juicio, «se ha perdido con el paso del tiempo», concluye.