Cáritas La Rioja atendió en 2023 a 147 personas sin hogar y dio respuesta a cerca de 1.000 familias que solicitaban apoyo en forma de ayudas para el alquiler de viviendas y el realquiler de habitaciones, ha afirmado este jueves su director, José Andrés Pérez.

Pérez ha realizado estas declaraciones en una rueda informativa, en la que también ha participado el técnico de esta entidad social Marcos Montoya para dar a conocer la campaña 'Nadie Sin Hogar 2024', que se difunde con motivo del Día de las Personas Sin Hogar, que se celebrará el próximo día 27, informa Efe.

El director de Cáritas La Rioja ha explicado que "se estima que en esta comunidad autónoma hay cerca de 300 personas sin hogar, y sigue en aumento la vulnerabilidad de muchas personas y familias que no pueden acceder a su derecho a una vivienda digna y adecuada".

"El actual modelo expulsa a las personas más frágiles, como son las que se encuentran en situación de 'sinhogarismo', por ello, es necesario y urgente continuar interpelando a las administraciones públicas, garantes de los derechos humanos, y al resto de la sociedad", ha subrayado.

Ha destacado que la campaña 'Nadie Sin Hogar 2024', que lleva por lema 'Caminemos juntos', "está inspirada en la simbología del Camino de Santiago para transmitir la necesidad de acompañar a las personas sin hogar durante el camino para que no estén solas".

Esta iniciativa de sensibilización, ha proseguido, "ha contado con la colaboración de una treintena de personas participantes de los programas de personas sin hogar de diversas Cáritas diocesanas, quienes han compartido su realidad vital y dificultades para sensibilizar a la sociedad".

27 familias en alojamiento temporal

Ha recordado que Cáritas La Rioja cuenta con el proyecto de 'Alojamientos Temporales', que ofrece un hogar temporal a familias sin vivienda adecuada, y dentro del que el año pasado se atendió a 27 familias con un total de 53 menores de edad.

"En 2023 dimos respuesta a 400 familias que solicitaban apoyo en ayudas de alquiler y a 523 familias para realquilares de habitaciones, de las que 90 eran monoparentales y 145 parejas con hijos, una situación que nos preocupa porque el realquiler de habitaciones es la antesala a estar en la calle", ha incidido.

Ha precisado que "desde las acogidas asistimos en 2023 a 147 personas sin hogar, de las que 21 eran mujeres, puesto que la realidad de mujer sin hogar es una cuestión en aumento y que precisa de actuaciones específicas".

Esta entidad, ha señalado, también cuenta con dos recursos residenciales de intervención dirigidos a dos colectivos específicos, por un lado, el proyecto 'Housing First. Personas Con Hogar', que ofrece vivienda a personas sin hogar y que en 2023 atendió a dos individuos en una casa.

Por otro lado, ha continuado, está el Centro Educativo de Orientación y Seguimiento para la Inclusión Comunitaria (CEOSIC), dirigido a personas que salen del centro penitenciario y en el que el año pasado se acogió a 29 personas.

En su intervención, Montoya ha resaltado que "entre las causas estructurales del 'sinhogarismo' destacan el desempleo, la precariedad laboral y el alto coste de la vivienda, que dificultan el acceso a una residencia digna".

Este técnico ha detallado que "el 82 % de las personas sin hogar señala que necesitaría una vivienda o habitación para poder salir de la situación en la que se encuentra; un 78 % afirma que necesitaría un trabajo; y un 38,6 % de una prestación económica".

"Factores como los problemas relacionales y personales, el aislamiento social, la soledad prolongada, la violencia de género, los problemas de salud mental o de adicciones, así como la situación migratoria irregular juegan un papel clave en el 'sinhogarismo'", ha resaltado.

Ha propuesto al Gobierno riojano "crear recursos residenciales más adecuados y que vayan más allá de la respuesta de emergencia en centros colectivos, ya que esta medida solo perpetúa el 'sinhogarismo' sin ofrecer soluciones a largo plazo".

Montoya ha indicado que "es necesario desarrollar nuevos recursos específicos para mujeres sin hogar, jóvenes y personas con discapacidad o con enfermedades mentales, así como una asignación presupuestaria anual destinada a la construcción y adquisición de viviendas de alquiler social".

"Para que el fenómeno del 'sinhogarismo' se reduzca es imprescindible fomentar la vivienda protegida y asequible para el conjunto de la población y, especialmente, de vivienda social para las personas en situación de pobreza y exclusión social", ha destacado.