La plantilla de Cruz Roja La Rioja, que lleva meses reivindicando un salario que, como mínimo, se ajuste a las tablas contempladas en el convenio del sector, de Acción en Intervención Social, se concentra mañana en Madrid, junto a sus compañeros de otros puntos del país, para reclamar una solución a las importantes diferencias retributivas existentes entre los trabajadores de distintas provincias. «Un empleado de Navarra, en el mismo puesto, puede percibir 300 euros mensuales más que uno de La Rioja», asegura Nuria Vicente, representante de Comisiones Obreras, que afirma que la base de la protesta es reivindicar lo que les «pertenece».
La representante sindical achaca estas diferencias a la existencia de 50 convenios colectivos, lo que genera una profunda desigualdad. «En lugar de tener un acuerdo colectivo aplicable a todo el país, Cruz Roja los ha ido negociando provincia por provincia, de tal manera que una psicóloga de Navarra percibe un salario sustancialmente más elevado que una de La Rioja o de Soria», argumenta la representante de los trabajadores, que reclama igualdad salarial y el fin a la precariedad.
Al respecto, asegura que hay categorías laborales con trabajadores percibiendo nóminas cercanas al salario mínimo, un cúmulo de circunstancias que mantienen bloqueada la negociación de varios convenios colectivos, entre ellos el de La Rioja, «hasta que decida un juez que se hace». Precisamente, esta concentración prevista mañana frente a la sede central de la organización en Madrid constituye el prólogo para el juicio que se celebrará la próxima semana en la Audiencia Nacional, donde se han denunciado una veintena de convenios provinciales de Cruz Roja, el riojano entre ellos, porque «están por debajo» del sectorial, La ONG, que cuenta con alrededor de 150 trabajadores en La Rioja, tiene otro frente abierto, una vez que la Justicia ha dado la razón a los sindicatos después de que la entidad despidiera a 149 personas, 14 de ellas en La Rioja, que la Audiencia Nacional ha ordenado readmitir. El Tribunal considera que se trata de un ERE encubierto o con extinciones de contrato fraudulentas por no haber superado el periodo de prueba.
Competencia desleal. Los sindicatos UGT y Comisiones Obreras acusan a Cruz Roja de 'dumping' porque hace competencia desleal a otras entidades del sector debido a los bajo salarios que abona a sus trabajadores.
«Es un llamamiento a las administraciones, tanto nacional como regional», explica Nuria Vicente, responsable sindical, que señala que Cruz Roja sale beneficiada de adjudicaciones públicas gracias a que compite con bajos precios. «¿Y por qué baja los precios»?, argumenta Vicente, «a costa de los salarios de sus trabajadores».
Se le reclama que se cumpla con la Ley de Contratos del Sector Público, cuyo artículo 35.1.n establece «la obligación de la empresa contratista a cumplir, durante todo el periodo de ejecución del contrato, las normas y condiciones del convenio colectivo».