Para cerrar el tema de la marquetería en el vino y las bodegas, hablaremos de los 'productos alternativos' a la fermentación y crianza de los vinos en madera. Existen de muy diferentes estilos y formatos y su función principal es aromatizar y enriquecer el gusto del vino con aromas y sabores vinculados a la madera.
Empecemos por decir que este tipo de productos y formatos no están permitidos en la DOCa. Rioja. La normativa que rige esta nuestra amada Denominación lo prohíbe expresamente. Pero sí están permitidos en otras zonas y tipos de vinos donde se usan habitualmente, a nivel nacional y en otros países.
Como comento, existen diversos formatos que se usan en diferentes momentos de la fermentación o la crianza. Empezaremos por lo más parecido a la duela (tabla) que forma una barrica y que es eso, un trozo de madera largo de diferentes medidas, desde 20 a 100 centímetros. Estas tablas están convenientemente tostadas y se sumergen en el depósito de vino donde realizan su función aromatizadora.
Por debajo de este primer formato en calidad aromática y precio están los dados de madera, de diferentes tamaños, aunque lo normal es de unos 2 centímetros cuadrados, con diferentes orígenes y tostados. Y por debajo tenemos las escamas de madera tostadas, con las que la cesión aromática es de menos calidad y eso se nota francamente en este tipo de vinos a cata y con análisis cromatográficos. Aún más abajo esta el serrín, que cede aromas más bastos y menos integrados. Y por último, y más gracioso, están los concentrados líquidos que básicamente son aromatizadores puros y duros.
En definitiva, existe toda una serie de productos que buscan enriquecer aromáticamente y darle sabor a un vino sin que este haya visto ni de lejos una barrica, bocoy o tina.
Se emplean para vinos de calidades más inferiores y como os he dicho están expresamente prohibidos en la DOCa Rioja. Pero no somos el centro del mundo y ya vemos que este tipo de productos se emplean por ahí y no por aquí. Que yo sepa…