La lectura es uno de los bienes culturales más preciados. Un libro es capaz de transportar a la persona que lo está leyendo a mundos inventados o paralelos donde vivir aventuras, combatir el crimen, resolver asesinatos, revivir la historia o vivir auténticas historias o dramas de amor.
Lo mejor de todo esto es que no hace falta viajar en tren, coche o avión sino que puedes viajar desde el salón de una casa, desde un banco en un parque o desde un bar tomando un café con bollos.
En esto último pensó Yakela Relabe, el autor o autora del libro Nos vemos en el bar, ya que ha dejado en numerosos bares de España esta novela de manera gratuita para que la gente la pueda leer. Lo curioso de esta historia es que se desconoce su verdadera identidad.
El proyecto empezó con el reparto del libro en más de 20 bares de Barcelona, y en ese momento se pensó que tal vez lo bonito sería que se hiciera en el resto de España. Las personas que conforman esta iniciativa fueron contactando con diferentes bares de España explicando la iniciativa, la cual se bautizó como #librosenlosbares.
El objetivo era intentar que al menos se repartieran tres libros en bares de cada una de las 52 provincias de España, algo que en La Rioja se ha conseguido, ya que están en El Café La Tertulia desde el 15 de julio, en el Namaste Lounge Bar desde el 17 de julio y en El Jardín Secreto desde el 11 de agosto.
El equipo de Yakela Relabe explica que el libro está escrito, tanto en masculino como en femenino porque «el autor o autora no quería que por el hecho de ser un hombre o una mujer, o sea de un sitio u otro, la gente pudiera hacer algún tipo de prejuicio en relación a la forma en la que está escrito». «Este pseudónimo de Yakela Relabe permite que la gente pueda hacer que el libro sea suyo», destaca.
La novela consta de 100 pequeñas historias y pensamientos del autor de hechos cotidianos que «cada persona puede vivir en su día a día». «Lo curioso es que cada una de estas historias, que son de unas dos paginas aproximadamente, acaban con la frase Nos vemos en el bar, que es como ha terminado titulándose este libro», señala.
Los relatos son inventados pero «podrían ser claramente reales», aclara un miembro del equipo. Destacan que la observación de los clientes en un bar permite crear «un montón de historias», ya que «se puede empezar a imaginar como es su vida y el motivo por el que hacen algunas actividades». Uno de los aspectos de estas historias es que son diferentes unas de otras. «Cuando hablamos con los bares nos comentan que hay gente que se lee cada día una historia porque están separadas y desconectadas unas de otras», apuntan.
Muy contentos. El equipo de Yakela Relabe promueve la lectura por toda España, y hasta el momento, sus miembros afirman que los bares contactados están «muy abiertos» en cuanto a la recepción del libro. «Estamos muy contentos con el feedback que estamos recibiendo», destacan.
Lo primero que hicieron fue ponerse en contacto directo con los propios bares de las diferentes provincias para entablar una relación pero «más adelante ha habido sitios que nos han pedido el libro. Esto pasó en El Jardín Secreto de Lardero, establecimiento que nos pidió una copia para sus clientes».
La Rioja, como dato curioso, fue una de las primeras comunidades autónomas en las que se asentaron con este proyecto. Aunque en otras provincias de la zona norte de España también ha habido buen feeling con esta iniciativa cultural, ya que «hemos obtenido una mayor respuesta y más movimiento».
«Soy lectora y la cafetería tiene fotos de la Generación del 27»
Uno de los bares riojanos que ha sido seducido por esta iniciativa cultural ha sido el Café Tertulia, que se puede localizar en pleno centro de Logroño, en concreto, en la Fuente Murrieta. Su propietaria, Belén Flecha Jaramillo, cuenta que se pusieron en contacto con ella por Instagram.
«Me pareció una idea muy bonita porque soy una persona lectora y en la cafetería está expuesta en fotografías la Generación del 27, así que encajaba todo», destaca. La idea es que los clientes lo lean en el propio establecimiento o en su casa pero «si se lo llevan deben devolverlo».
El libro lleva unos meses en el bar y se lo han leído un par de personas, ya que «hay gente que le cuesta más leer, se toman su tiempo o porque se le olvida traerlo de vuelta». Flecha asegura que le gusta confiar en sus clientes y quien se lo lleva a su casa, sabe que lo va a devolver para que lo disfrute el próximo cliente. «Si no lo hacen me daría mucha pena porque es una iniciativa muy bonita», indica.
Otro de los bares que decidió apoyar esta iniciativa lectora fue el Namaste Lounge Bar, ubicado en el barrio del Campillo en Logroño. Su encargada, Adelina Ionela, cuenta que la propuesta también les llegó por Instagram.
Un aspecto llamativo de esta iniciativa es que «el libro cuenta con el misterio de que no sabes quien es el autor, así que no se sabe si es hombre, mujer o su procedencia», apunta. «La curiosidad de leerte el libro e ir conociendo al autor misterioso me pareció interesante», señala.
Ionela remarca la importancia de realizar iniciativas similares , ya que «hacen falta para salir de la rutina. A mí sinceramente me gustó mucho», subraya.