Los pasillos de la Universidad de La Rioja (UR) desprenden ya un intenso ambiente a elecciones. La institución académica tiene previsto convocar los comicios para la renovación del equipo rector a finales de año, en principio en noviembre, y a cuatro meses vista, los movimientos dejan atrás el silencio aunque mantienen cierto sigilo para barajar unas opciones a concurso que más que en una carrera de fondo y en paralelo, discurren enfrentadas y con las lanzas en alto hacia el edificio del rectorado. Y eso, que no hay nada confirmado aún.
Lo que sí conforma ya una evidencia es que el actual equipo rector, cargado de razones o no, ha generado un sólido malestar en una parte del personal docente que ha firmado un contundente basta ya por el que que quieren luchar.
Juan Carlos Ayala, el actual Rector, disfruta estos días de la tan española costumbre vacacional y con permiso del mes estival por excelencia que hoy arranca, aún no ha decidido si concurrirá a la renovación. Así lo trasladó, de forma oficial, la propia Universidad. Sin embargo, a la espera de su determinación, y radicalmente enfrente, se avanza en posturas. La primera que salió a la palestra fue la de un catedrático adscrito al área de Ingeniería cuyo nombre se mantiene en silencio. Voces autorizadas e internas de la propia UR aseguran que asumió, en un principio, la responsabilidad de la candidatura con el objetivo de, al menos, intentar un cambio ante la gestión del actual órgano rector. Ahora bien, en los últimos días se va cocinando en la sombra otra candidatura cuyo nombre tampoco ha querido ser desvelado por las mismas fuentes, pero que estaría vinculado al área de Ciencias de la UR.
En el caso de que esta opción se materializara, el catedrático ingeniero mostraría públicamente, y sin ningún tipo de tapujos, su apoyo incondicional al docente de Ciencias. De lo contrario, el primero mantendría vivas sus opciones. En cualquier caso, una candidatura disputará el rectorado con Ayala, siempre que finalmente decida concurrir.
Se trata de unos movimientos derivados del malestar generado por el actual equipo rector en parte del personal docente universitario. Y en concreto, todas las miradas, prosiguen las mismas fuentes, apuntan a la Vicerrectora de Ordenación Académica y Profesorado, Eva Sanz Arazuri, «y a un rector que le ha dejado hacer a su antojo».
Recuerdan las mismas voces autorizadas que la sentencia del juzgado de lo Contencioso Administrativo de 23 de julio por la que quedaba anulaba la sanción impuesta por el rectorado a una profesora de la Universidad de La Rioja «tiene su sello». Pero «ese recurso judicial puede ser solo la punta del iceberg», aseguran.
El objetivo, bien si se formaliza la candidatura procedente del edificio de Ciencias, o bien la del catedrático de Ingeniería, pasa por batallar, por sumar apoyos, por plantear otra gestión alejada de la actual y por concurrir a la cita electoral con las mayores opciones posibles. Opciones que además, se acompañan de lanzas en alza y banderas izadas. Todo ello en una carrera al rectorado que acaba de arrancar.