La alegría va por barrios. Mientras decenas de logroñeses se concentraban frente a la administración de Lotería número 6, con más curiosos que agraciados por el chirimiri de millones del Gordo, Bomberos de Logroño accedían a un tercer piso del número 24 de la avenida de Solidaridad de la capital riojana. En un primer instante, los servicios sanitarios accedían pasadas las 11.30 de ayer domingo por el portal del inmueble con el objetivo de acceder a la vivienda mientras efectivos del Cuerpo de Bomberos se afanaban en preparar la escalera para alcanzar la segunda planta, que permanecía con las persianas bajadas.

Según las fuentes consultadas por El Día de La Rioja, en la vivienda vivían dos hermanos de avanzada edad. El hombre falleció hace aproximadamente dos meses y desde hace tiempo no se habían tenido noticias de la mujer que, siempre en base a las mismas fuentes, padecía alzheimer. 

La entrada a la vivienda se producía por tanto, con una orden judicial en la mano tras no disponer de noticias sobre el paradero de la mujer.

Ya con la escalera a la altura del segundo piso y después de que los sanitarios no obtuvieran respuesta en el interior del piso, los bomberos tuvieron que forzar las persianas de forma previa a la apertura de la ventana que daba acceso al inmueble. Una vez dentro, pudieron comprobar que, a pesar de las sospechas, la mujer no se encontraba en el interior de la citada vivienda. 

No han trascendido más datos sobre el posible paradero de la mujer y ni siquiera consta, al menos hasta ayer, ni en el registro de desaparecidos del ministerio del Interior ni en la web de Sos Desaparecidos. Un espacio de participación y colaboración en el que siguen figurando hasta seis riojanos, o residentes en el ámbito de la Comunidad autónoma riojana, cuyas desapariciones fueron denunciadas.

Otros casos. La última de ellas es Alana, la niña de cuatro años cuya desaparición se localiza en la localidad de Ollauri, donde residió durante unos meses. Un caso en el que todas las sospechas apuntan hacia su propia madre, quien se la podría haber llevado a Colombia. 

A principios de año también se denunció la desaparición de Adolfo Fernández, un vecino de la localidad camerana de Rabanera de 67 años de edad del que no se sabe nada desde marzo del presente ejercicio 2024.