Natxo González (Vitoria, 1966) lleva dos meses al frente de una Unión Deportiva Logroñés que cierra la primera vuelta en descenso. Si la desesperación invade a los seguidores blanquirrojos, el técnico alavés, siempre pausado, busca los brotes verdes de una trayectoria que, en su caso, ha ofrecido nueve partidos, siete ligueros en los que se han conseguido cinco puntos. Su balance, sin tapujos, es de «suspenso» y así lo explicitó ayer en Campeones, en La 7 de la Rioja. El preparador blanquirrojo confía en que el empate ante el Castellón sea «un punto de inflexión». Aunque el conjunto albinegro acogotó a los logroñeses, la igualada fue muy meritoria y así lo considera el alavés que define al segundo clasificado como «el mejor equipo» del grupo.
Aunque es su estreno en Primera RFEF, no duda en afirmar que la categoría tiene jugadores «que podrían estar en Segunda», recordando la entidad de planteles como el castellonense.
Si en su presentación como entrenador se mostró ambicioso al máximo («vengo a subir, no he venido para ser octavos»), la dinámica de resultados obliga a pensar en el corto plazo. Natxo González insiste en centrarse «en el camino», en los pasos adelante que el equipo está dando aunque no se hayan traducido en victorias.
El entrenador recordó que el vestuario está «tranquilo». De naturaleza calmada, asegura que «no mira la clasificación», consciente de que ésta no será determinante «hasta que falten diez jornadas». Eso sí, el encuentro ante el BarçaAtlètic, el Castellón o el próximo ante el Atlético Baleares los afronta «como una final». Solo espera que un triunfo 'desatasque' la frustración acumulada tras diez jornadas sin conocer la victoria.
El entrenador ni pide ni exige refuerzos, consciente de que ese negociado depende de Dupi y de la disposición de tesorería. Eso sí, lamenta las numerosas bajas ofensivas que han lastrado al equipo. Natxo González informó que Clau Mendes se ejercitó ayer con el grupo y que en principio está recuperado. Valora la aportación de Gonzalo en portería («mantenerla a cero era muy importante») y agradece el paso adelante dado por el capitánIñaki.