El debate sobre la fusión entre Unión Deportiva Logroñés y Sociedad Deportiva Logroñés vuelve a entrar en escena. La temporada 2024/25 será la primera desde 1977/78 que no contará con ninguno equipo riojano en alguna de las tres máximas categorías del fútbol masculino español e, inevitable, la eterna controversia sobre si es posible una fusión entre ambos sobrevuela involuntariamente la capital riojana. Una controversia que comenzó en 2009 y que ahora que el fútbol riojano, y el logroñés en consecuencia, se encuentran tocando fondo, en la cuarta categoría nacional, vuelve a salir a flote.

En 2009, año de creación de ambos clubes se dio el primer intento, con el nacimiento de ambos clubes y antes de comenzar la planificación de la temporada. El 4 de junio de 2009 se fundó la Sociedad Deportiva Logroñés. Cinco días antes, el Varea había conseguido el ascenso a Segunda B al derrotar en su propio feudo al Cerro Reyes a penaltis. Previamente a la Primera Asamblea de Socios donde se nació el club blanquirrojo, se habían mantenido reuniones para una posible unión entre los clubes, aunque la Unión Deportiva Logroñés todavía no existiera como tal. Sin embargo, la UD Logroñés compró la plaza del Varea en Segunda B, algo que ya se rumoreaba en caso de que los arlequinados consiguieran el ascenso y finalmente, ese primer envite de amalgama fue en vano, compitiendo su primer año 'de vida' la UD Logroñés en el Grupo III de Segunda B y la SD Logroñés en Regional Preferente.

Hacia la recta final de esa temporada, el debate volvió a cobrar fuerza. El objetivo, a través de un comunicado, fue el de que «a todos los efectos, administrativos, deportivos y jurídicos, ambos clubes estarán integrados en una misma sociedad anónima deportiva». De tal manera, si ese objetivo se conseguía, ambos equipos se unirían bajo el nombre, escudo e insignia del CD Logroñés. El sábado 20 de marzo de 2010, los socios de la UD Logroñés se reunieron en la sala Gonzalo de Berceo en una asamblea informativa para que el día después, en el que los blanquirrojos jugaron en Las Gaunas contra el CD Denia, realizaran una votación en la que cada socio podía «pronunciarse sobre el proyecto», que terminó con un resultado de 1.156 votos a favor y 99 en contra. Un 92% fue sí. Unos días después, el jueves 15 de abril, fueron llamados a las urnas los socios de la SD Logroñés. La votación, que se celebró en los días posteriores a la dimisión de Rafael Álvarez como presidente en la Sala de Usos Múltiples del Ayuntamiento de Logroño, terminó con 316 votos en contra por los 98 a favor de la fusión. En ellas se podía leer el mensaje: «¿acepta usted la propuesta para integrarse en un único club con la UD Logroñés? ¡Disolviendo la SD Logroñés!». Eso frenó por completo el proceso.

Votación entre los socios de la UDL el 21 de marzo de 2010. - Foto: Óscar Solorzano.

El tercer intento se reactivó en mayo de 2014. Ese verano, con el descenso de la Sociedad Deportiva Logroñés a Tercera, reabrió más que nunca la posibilidad de una fusión con la Unión Deportiva Logroñés, que sufrió, pero consiguió la permanencia en Segunda B. Las fuentes consultadas por este diario afirman que este tercer intento de mezcla fue «el más cercano». «Aquí es donde más cerca estuvo, donde hubo más reuniones hasta altas horas de la madrugada, muchas propuestas, correos electrónicos entre los clubes…». De hecho, aseguran que «durante tres días estuvo hecho, la fusión por fin iba a ser una realidad». En ese momento, los diferentes usuarios de ambos clubes crearon, dentro de la red social Twitter, el lema (hashtag) «UnsoloLogroñés», para apoyar dicha unificación y mostrar su apoyo a las decisiones y reuniones que estaban celebrándose durante esos meses. Sin embargo, todo cambió de un momento para otro. Más concretamente, la tarde del miércoles 21 de mayo.

Félix Revuelta declaró que «la sensación que me transmiten es que unas minorías están pudiendo con la mayoría, como está pasando en política. Las minorías, que son las que más chillan, son las que mandan y la masa más importante nos quedamos callados, porque somos más tranquilos. Esa es la sensación que me está dando. Creo que una gran mayoría de los aficionados al fútbol de Logroño quieren la unión, les da lo mismo cómo. Ante esa una minoría que grita y chilla mucho y es la que manda, tenemos que empezar a ser valientes y arriconarles, saber decir basta».

Esas palabras dolieron en el seno de la SD Logroñés. Y finalmente, tras unos días de reflexión entre ambos clubes, la fusión volvió a frenarse en seco. La ocasión en la que más cerca se estuvo se desvaneció por completo en cuestión de días y, desde ese momento, nunca más se ha vuelto a hablar de una posible fusión. Cada equipo ha construido su propio camino, independientemente de su vecino. Es por eso que, dichas fuentes consultadas, de ambos clubes, coinciden en un aspecto, y es que a día de hoy «la fusión es altamente improbable y no factible porque cada uno ha elegido su camino». «El tiempo de unirnos ya pasó y ahora mismo el único camino posible para que haya solamente un club en Logroño es que uno se imponga y el otro tiene que desaparecer». Solamente el tiempo es sabedor de qué terminará ocurriendo.