El Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) ha denunciado este martes las operaciones de los últimos días por parte de las fuerzas de seguridad palestinas en el campamento de refugiados de la ciudad cisjordana de Yenín y ha dicho que se trata de "un crimen nacional" contra los "combatientes de la resistencia".
El grupo islamista ha afirmado que la Autoridad Palestina "hace oídos sordos a las voces palestinas que piden el fin de la operación y que se proteja a la resistencia, que supone un escudo firme para el pueblo, la tierra y sus lugares santos frente a los crímenes de la ocupación y los colonos".
Así, ha reclamado una "movilización" para "repeler esta operación de seguridad, que beneficia al Ejército de ocupación y sus fallidos sueños de poner fin a la resistencia en Cisjordania", según un comunicado recogido por el diario palestino 'Filastin', vinculado a Hamás.
En este sentido, el grupo ha pedido que "las armas sean dirigidas contra la ocupación, que ha llegado demasiado lejos derramando la sangre de los palestinos y ha expandido un genocidio que afecta a niños, mujeres y ancianos ante una impotencia sin precedentes por parte de la comunidad internacional".
El comunicado ha sido publicado tras varios días de enfrentamientos entre las fuerzas de la Autoridad Palestina y las Brigadas de Yenín en el citado campamento, incidentes en los que ha muerto un comandante del grupo identificado como Yazid Jaysé y un adolescente de 16 años, provocando las críticas de Hamás.
Las Brigadas de Yenín, que incluyen a miembros de las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa y los brazos armados de Hamás y Yihad Islámica, han protagonizado numerosos enfrentamientos con las tropas israelíes durante los últimos meses, debido a las decenas de operaciones lanzadas contra el Yenín y su campamento de refugiados, punto neurálgico de las operaciones armadas en Cisjordania.
Las autoridades palestinas han asegurado que actúan en Yenín para acabar con el "caos", si bien han recibido críticas de diversas facciones armadas, que argumentan que estas operaciones benefician a Israel y debilitan a las acciones armadas contra las fuerzas de seguridad israelíes, en medio del conflicto en Oriente Próximo.