Dos grupos en uno

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La UD Logroñés se distancia de Calahorra y Náxara y luchan por objetivos distintos

La UDLse impuso al Calahorra el pasado domingo y la semana que viene recibirá al Náxara, también en Las Gaunas. - Foto: Óscar Solorzano.

El derbi riojano que libraron el pasado fin de semana Unión Deportiva Logroñés y Calahorra en Las Gaunas fue uno de los más descafeinados que se recuerdan. Un derbi suele ser sinónimo de intensidad, lucha, garra, carácter y ese orgullo de, en una lucha entre iguales, querer superar a tu rival por orgullo propio. El del domingo fue todo lo contrario. Un partido  insulso, deslavado, aburrido y en el que solo se jugaron 28 minutos, si es que en esos minutos se jugó realmente a algo.

Detrás de esa victoria 4-0 de la UDLal Calahorra podrá haber decenas de claves técnico-tácticas que avalen el dominio de los blanquirrojos ante los rojillos y el resultado tan abultado que consiguieron. Lejos de esos hipotéticos análisis y conjeturas, el último derbi en Las Gaunas evidencia algo más. Y es que, a día d e hoy, los equipos riojanos que militan en el Grupo IIde Segunda RFEFluchan por objetivos diferentes. Aunque compartan grupo y categoría, es como si los tres equipos estuviesen encajonados en dos subcompeticiones. Los que pelean por la parte alta y los puestos de ascenso y los que están en la parte baja y luchan por no descender a Tercera RFEF.

Empezando por el final, está el Náxara. El equipo de La Salera es colista y ha firmado el peor comienzo de un equipo en toda la historia de  la Segunda Federación. En las once jornadas disputadas desde que la competición empezó, los najerinos no han derrotado a ningún rival y solo han conseguido dos empates,ante Arenas de Getxo en Nájera y frente al Gernika en Urbieta, el pasado fin de semana. Una mala racha de resultados, el poco nivel mostrado por los jugadores najerinos en las primeras jornadas junto a goles encajados en la recta final de los partidos, la mala suerte y las lesiones, han provocado que el Náxara no  haya salido del farolillo rojo desde las primeras semanas de competición.  «Cuando llegue una victoria, la situación va a cambiar bastante y vendrán más seguro», aseguró en una entrevista a este diario el lateral izquierdo, Izan Flaño.

Por otro lado, el Calahorra arrancó de manera inmejorable la temporada. Dos victorias ante la Mutilvera (3-0) y contra el San Juan (0-1) invitaban al optimismo de un bloque rojillo que lideró momentáneamente la clasificación. Sin embargo, la irregularidad se apropió del conjunto de Carlos Pouso, que solo ha sumado siete puntos de los últimos 27 y solo dos victorias, por la mínima, ante Náxara y Brea. El planteamiento mostrado en el verde en las últimas jornadas demostraban que el de Pouso, «un equipo joven y en construcción, sin pasado pero con mucho futuro», como él mismo calificó, mejoraba con el paso de los partidos, aunque no terminasen de llegar las victorias. La derrota del pasado domingo ante la UDL puso en evidencia las debilidades del Calahorra, que, como dijo su propio entrenador, de ese derbi «solo podía obtener cosas negativas» para trabajar en ellas y mejorar de cara al futuro. Por juego y resultados, Náxara y Calahorra entrarían a día de hoy en ese grupo que compite para no descender.

Y por su parte, la UDLogroñés, equipo con mayor presupuesto de los tres y con el objetivo del ascenso desde el anuncio de Carlos Lasheras y la confección de la plantilla, quedaría encajonado en ese otro 'subgrupo' de los que pelean por Primera RFEF. La temporada de los de Diego Martínez es notable. No es mala, pero tampoco es todo lo buena que, por jugadores y exigencia, debería ser. Tras un maratoniano inicio de temporada, en el que ha jugado 18 partidos en 68 días (y que terminó con su partido frente al Barakaldo), consiguió la clasificación a Copa del Rey gracias a su papel en Copa Federación. Sin embargo, ahora centra todas sus batallas en la liga, donde es cuarta, a siete puntos del líder y con el debe de haber perdido puntos fuera de casa contra rivales más 'débiles' como Barbastro, Valle Egües y Deportivo Aragón y de hab er empatado en todos sus enfrentamientos contra rivales de la parte alta (Alavés B, Bilbao Athletic y Barakaldo). Mucho por disputar y todo por resolver en el Grupo II de Segunda RFEF de la que aún restan dos tercios de campeonato.