Experto en tráfico y seguridad vial, Miguel Navarro lleva impartiendo formación para recuperar el permiso de conducir y los puntos desde el año 2008 y  calcula que por sus clases  habrán pasado «entre 5.000 y 6.000 alumnos»

Recuerda que el actual carné  por puntos se implantó en España en julio de 2006 y que la capital riojana «fue la tercera ciudad en España donde comenzaron los cursos, tras Elche y Pamplona, y lo hicieron con un único alumno»

Este formador explica que las autoescuelas riojanas ofrecen un curso mensual de 24 horas «repartidas en cuatro días con seis horas de formación» para la recuperación de la licencia y otro también mensual enfocado a la recuperación parcial de puntos de doce horas «dividido bien en dos jornadas de seis horas o en tres jornadas de cuatro horas».

Asegura que los problemas de consumo de alcohol, exceso de velocidad y distracción al volante por el uso de móviles están detrás de la mayoría de la retirada de puntos y alerta de que cada vez tiene mayor peso el consumo de drogas, «porque hay más controles y tenemos que por cada conductor denunciado por tasa excesiva de alcohol, hay tres por consumo de sustancias».

Precisamente el alcohol y el consumo de drogas es lo que más les preocupa y lo que trae a más conductores a las aulas. «De hecho en los cursos de alumnos que han perdido todos los puntos, de cada 20 alumnos, 15 han sido condenados penalmente por delitos de alcoholemia», advierte.

alcohol. De hecho, Navarro lamenta que desde la Dirección General de Tráfico «no se imparta formación suficiente respecto a los riesgos de conducir bajo los efectos del alcohol» 

«Es triste que en 18 años no hayamos conseguido que cale el mensaje de que alcohol y conducción no son compatibles. Hay que advertir que con el alcohol se pueden perder puntos y se puede acabar en el juzgado. Se debería ir más allá y la administración se debería atrever a imponer una tasa cero de consumo en la carretera». 

En cuanto al perfil del conductor que pasa por los cursos de recuperación, la edad media oscila entre los 35 y 45 años «y esta franja no ha cambiado con los años». El alumno más joven que recuerda «tenía 15 años con licencia de ciclomotor» y el más mayor «92 años». La presencia de mujeres es «minoritariay no llegan al 10% como también lo son las personas más mayores».

Este instructor considera necesario aclarar que solo se pierden puntos del carné de conducir «si se trata de una infracción administrativa», mientras que, cuando se produce un delito, «no se pierden puntos sino que el juez priva temporalmente al conductor del uso del permiso de conducir». 

reforma. Este experto cuestiona el sistema de carné por puntos y asegura «que no sirve, está caduco porque ni los conductores ni los coches son iguales que cuando se implantó y, sin embargo, siguen recibiendo la misma formación». En este sentido, entiende que se debe apostar por «dar mayor formación a los conductores y sensibilizar. Se tiene la sensación de que la DGT trabaja con afán recaudatorio y hay que enseñar a los conductores que lo más importante no es la sanción  porque esta inhibe determinados comportamientos, pero no los modifica. Hay que hacer una reforma a largo plazo empezando por impartir educación vial desde la infancia y por sensibilizar y reciclar a los conductores».