La Universidad de La Rioja ha acordado el archivo de las actuaciones iniciadas el 18 de septiembre tras la información publicada en un medio de comunicación regional sobre los mensajes y comentarios denigrantes que estudiantes matriculados en el Grado en Educación Primaria habrían enviado a un grupo de WhatsApp sobre sus nuevas compañeras.
Tras la publicación de aquellas informaciones, la UR puso en marcha un procedimiento de actuaciones previas cuya responsabilidad recayó en un instructor que contó con el asesoramiento de la Comisión que a tal efecto fue nombrada por el Rector.
Una vez concluido el análisis de la documentación y los testimonios recopilados, la instrucción concluye que los hechos son ajenos a la potestad sancionadora de la Universidad en aplicación de la Ley estatal de Convivencia Universitaria y de su traslación en el Reglamento Disciplinario de la UR, que delimitan la potestad disciplinaria universitaria al ámbito de la actividad desarrollada en las instalaciones, sistemas y espacios de la universidad.
El informe de la instrucción sostiene que, si bien se ha podido determinar la identidad de una de las personas participantes (que reconoció voluntariamente haber realizado comentarios en dicho chat) y su relación académica con la UR, no es viable aplicar la potestad disciplinaria universitaria. Por un lado, porque dichos comentarios fueron realizados fuera de la actividad de la universidad, de sus instalaciones y utilizando medios ajenos a ella; por otro, porque los comentarios se publicaron en un chat de carácter privado.
En el caso del estudiante que voluntariamente reconoció su participación activa en el grupo, el instructor propone una reprobación por escrito. Además, el informe invita a la Universidad de La Rioja a adoptar medidas de carácter formativo entre su alumnado universitario tendentes a evitar este tipo de situaciones reprochables, actividades que la UR viene desarrollando regularmente desde hace varios cursos académicos.