A Daniel Osés (Nalda, 1986) se le dan tan bien los deportes que uno puede pensar que debería ser consejero de Deporte. Sin embargo, para evitar polémicas superfluas, asegura que la cartera deportiva de la región «está en muy buenas manos». «Yo, como José Luis Pérez Pastor, también soy de manos calientes», bromea en alusión a su compañero en el consejo de Gobierno y que, hace unos viernes, también se asomó a estas últimas. Pero mientras que su par blande entre sus manos una pluma, él sostiene una raqueta, actividad que se le da francamente bien. ¿Era bueno el consejero de Política Local en frontenis? «Lo era, aunque está mal que lo diga», se ríe mientras se arremanga para sacar a relucir su derecha en el frontón de Nalda. Sin darse importancia, la pone en el '9', arrimada a pared izquierda, como mandan los cánones. Pese a que coge la raqueta con su derecha, asegura ser «ambidiestro». «Pero en política soy muy claro», se ríe mientras continúa la sesión fotográfica.
Daniel Osés, en el cuerpo a cuerpo, se muestra al natural, cordial y relajado. El entorno, Nalda, le favorece. Fue en este municipio donde inició su carrera. No solo la política, que es su revés más conocido.
«Fui campeón de LaRioja de frontenis en dos ocasiones. La última», completa, «en 2011». Con la compañía de FélixPérez se caló la txapela. Apenas unos meses después recibió la vara de mando del Ayuntamiento de Nalda, responsabilidad que abandonó hace nada para asumir la consejería de Política Local, Infraestructuras y Lucha contra la Despoblación.
No sabe si sus compañeros de armas, políticas, son tan buenos como él con una raqueta entre las manos, pero Daniel Osés siempre ha destacado en el deporte.«A pelota no he jugado mucho, aunque sí participé en el Interpueblos. El fútbol sala también me gustaba y aunque jugaba un poco a pala, tengo que reconocer que el frontenis y la bici se me daban muy bien. En verano ganaba muchos torneos», rememora sin ánimo de fardar. Ahora, cuando sus reponsabilidades laborales y familiares(acaba de ser padre y confía en que su hijo Daniel «sea deportista sí o sí») se lo permiten, se entretiene con el pádel.«Pero es cierto que no saco mucho tiempo», se lamenta.
Como quien tuvo, retuvo, el consejero se mantiene en forma aunque apenas saque tiempo para presumir de golpeo. El frontenis, como cualquier otra actividad, es una cuestión de práctica y a Daniel Osés le sobra. «He echado más horas aquí, que en la carrera de Derecho», se ríe antes de cerrar la puerta del frontón de su pueblo para encaminarse, de nuevo, hacia su despacho.