Sin discusión y sin apenas discrepancias, los colectivos implicados en la celebración de las fiestas de San Mateo coincidieron ayer, de manera muy mayoritaria, en que se desarrollen el próximo septiembre entre el 20 -que este año es viernes- y el 26.

Los concejales de Promoción de la Ciudad, Miguel Sáinz, y  de Festejos, Laura Lázaro, mantuvieron una reunión  en el ayuntamiento de Logroño con todos los colectivos implicados en la 67 edición de las fiestas de la Vendimia, así como con los representantes de la comunidad educativa, para definir el calendario de las fechas de esta celebración  Con dos opciones planteadas, del 20 al 26 o del 15 al 22, fue la primera la que concitó una querencia muy mayoritaria, desde representantes de la hostelería o vecinos, a los colectivos vinculados directamente con la fiesta, como feriantes, o representantes de empresas y trabajadores.

La excepción la representaron los colectivos educativos, tanto sindicatos del profesorado como AMPA, que defienden la semana natural para generar menos disrupción a los estudiantes. 

El amplio respaldo que consiguieron los días elegidos se sustentó en diferentes argumentos, como evitar la coincidencia en fechas con otros municipios y capitales en fiestas o poder asegurar una mejor configuración de carteles y atracciones. 

Vocación de continuidad.   «Comercio, hostelería, peñas, agencias de viajes... hemos coincidido casi todos», relataba Francisco Martínez Berges, presidente de la Asociación Hostelería Riojana, que entiende que son fechas que solo aportan «ventajas» a distintos implicados. Por ello, señaló que la voluntad defendida, igualmente de manera mayoritaria, es que estas fechas -que son las consideradas como tradicionales- sean las que permanezcan de manera inamovible para próximos años.

De la misma manera se expresa Carlos Salicio, representante de la Asociación de Vecinos, que coincide en que «todo el mundo sabrá siempre como organizarse, tanto las familias como las empresas», sobre unas jornadas que al actual equipo de Gobierno no parecen desagradar.

De hecho, el Ayuntamiento inició este proceso de consulta con el fin de definir cuanto antes las fechas para que los diferentes colectivos dispongan de una previsión adecuada y puedan orientar de la mejor manera posible sus actuaciones, definiendo calendarios vacacionales, educativos, o de otra índole. 

Será, no obstante, el pleno municipal el que ratifique la continuidad de estas fechas.