José Luis Rabadán, médico especialista en adicciones y secretario de la Asociación riojana de ayuda a la drogadicción (ARAD, resalta el importante cambio que respecto a la percepción de las drogas ha experimentado la sociedad española, una afirmación que sustenta en encuestas del CIS, que en 1988 [en unos años en el que el azote de la heroína diezmó a una generación] reflejaba que el 96% de los ciudadanos la consideraba un «problema importante o muy importante» para alcanzar en la actualidad unos porcentajes anecdóticos.
Frente a esta apreciación, asegura que el problema de las drogas es mayor al encontrarse en el mercado diversas sustancias como la cocaína, el speed, el hachís, la marihuana o detectarse los nuevos comportamientos de juego on line en adolescentes. «La oferta es mayor, de tal manera que la cifra de potenciales consumidores es mucho más elevada y sin embargo no preocupa a los españoles», razona Rabadán que entiende que esta despreocupación supone un revés.
Apunta que esta es una de las razones por la que las drogas se sitúan fuera de foco y se encuentran al margen de la agenda política. Para justificar esta impresión, menciona el abandono «prácticamente total» de los programas de prevención, que se recortaron con la crisis económica de 2008 y no se han recuperado.
Niños de 12 y 13 años. El doctor alude al estudio piloto realizado sobre el uso de drogas entre los chavales de 12 y 13 años, que señala que más del 34% han consumido alcohol alguna vez y el 7% se ha emborrachado, el 8% reconoce haber fumado, el 91% haber jugado con videojuegos en el último año y el 9,3% haberlo hecho online con dinero. «El consumo de alcohol a estas edades puede provocar un daño crucial a un organismo que está todavía formándose», resalta Rabadán, que resalta el aumento del consumo de ansiolíticos, particularmente en chicas, mientras que en los chicos son el uso de videojuegos y el juego online los principales problemas.
A la luz de los datos que ofrecen el informe Estudes y otros estudios, incide en la prevención y apunta que invertir un euro en ello «ahorra 15 en asistencia». Insiste en que es un asunto de un cariz de entidad suficiente para convencer a la clase política de que es necesario actuar.
Cita el nuevo plan que anuncia la ministra de Salud, Mónica García, para frenar el consumo de alcohol entre los menores y recuerda que ya se han redactado cinco «que se han guardado en un cajón». Al respecto, indica que ha participado en la redacción de alguno de estos programas que no han llegado a ponerse en marcha.
«Los adolescentes se comportan a imagen y semejanza de sus mayores», reconoce el médico especialista en adicciones, que señala de la necesidad de convencerles «de que no es lo mismo el consumo de alcohol a los 14 años que a los 25», una tarea que recae en la responsabilidad colectiva porque una ley «por si sola» no puede atajar el problema.