La revista médica certificada Reproducción Asistida ORG indica que entre un 12% y un 18% de parejas que quieren tener un hijo descubren que sufren infertilidad. En el 30% de los casos las causas son de origen masculino y, en otro 30%, de origen femenino. También dicen que en el 20% de los casos ambos progenitores presentan problemas de fertilidad y el 20% restante corresponde a la esterilidad de origen desconocida (EOD), que se produce cuando las causas no se pueden identificar.
La solución que se proporciona en estos casos es la reproducción asistida. Existen varias técnicas para ello, desde la inseminación artificial con semen conyugal o de donante, hasta la fecundación in vitro (FIV), inyección intra-citoplasmática (ICSI), diagnostico genético preimplantacional (DGP) y preservación ovocitaria y de semen para pacientes oncológicos y transgénero.
La jefa de Servicio de Obstetricia y Ginecología del Hospital San Pedro, María José Puente, informa que el año pasado se hicieron unas 161 punciones de fecundación invitro y unas 315 inseminaciones, de las de 50 fueron con semen de donante y 265 con semen de cónyuge. Estas han ido incrementando con el paso de los años, ya que en el 2021 se hicieron 131 punciones de fecundación in vitro y 271 inseminaciones, 17 con semen de donante y 254 con semen del cónyuge; y en 2022 fueron 141 punciones de fecundación in vitro y 268 inseminaciones, 34 con semen de donante y 234 con semen de cónyuge.
Estas cifras muestran que la cantidad de mujeres que hacen uso de este proceso aumenta año a año. Puente comenta que ahora se pospone más la búsqueda de quedarse embarazada por cuestiones laborales, sociales y por la forma en la que cambia la sociedad actual.
Además de que la fertilidad de las mujeres decae gradualmente. «La fertilidad espontánea de una mujer suele ser de un 85% hasta los 35 años, a partir de los 30 suele caer hasta un 75% y a partir de los 35 años esta baja hasta un 66%», detalla. De hecho, añade que a partir de los 40 años, solo hay entre un 5 y un 15% de probabilidad de conseguir un embarazo natural en doce meses.
Esta experta destaca que estas técnicas cada vez son más exitosas. Indica que la fecundación in vitro un éxito de un 40% y en las inseminaciones con semen de donante hasta un 35% y con cónyuge un 25%. «Antes era menor pero se selecciona muy bien a los pacientes», asegura.
Estos tipos de reproducciones asistida, apunta, suelen hacer que se produzcan entre 135-150 nacimientos anuales.
Una ayuda importante para la reproducción asistida es la creación de nuevas técnicas. Puente cuenta que existe una nueva técnica que se llama Zymot que quieren incorporar en el laboratorio. «Esta consiste en la selección del esperma menos fragmentado para que tenga más éxito a la hora de fecundar», detalla.
Edad. María José Puente explica que el límite para acceder a esta consulta de reproducción asistida es de 23 a 40 años. «Hay que poner un tope de edad para incluir todas estas técnicas dentro de la seguridad social», admite.
Señala que la media de edad de mujeres que suelen acudir está entre los 35 y los 39 años. «Mujeres con menos años también vienen pero cuando tienen algún tipo de patología», apunta.
Detalla que las mujeres que tienen entre 35 y 40 años, y durante seis meses no han conseguido quedarse embarazada de manera natural, son candidatas a acudir a la consulta de fertilidad y esterilidad para hacer un estudio. En cambio, con las mujeres que son menores de 35 años se espera un año para ver si han conseguido quedarse embarazadas.
Estas técnicas, asegura, son las que van a hacer que aumente la natalidad en la sociedad.