Alargar la educación obligatoria hasta los 18 años es el nuevo debate que pone sobre la mesa el Consejo Escolar del Estado, y lo incluye entre las mejoras que plantea al Ministerio de Educación. El objetivo, dicen, es con ello reducir la tasa de abandono educativo temprano, que aumenta en España después de tres años de descenso, situándose con ello como el segundo país de la Unión Europea con la tasa de abandono temprano de la educación más alta, con un 13,9%, únicamente por detrás de Rumanía (15,6%), y posicionándose 4 puntos por encima de la media europea, que se sitúa en un 9,6%.
Esta idea como solución al problema del abandono escolar, sin embargo, no parece tener una buena aceptación por parte de los docentes, y es que según reflejan los datos del estudio realizado por el sindicato CSIF, el 92% de los profesores se opone a alargar la educación obligatoria hasta los 18 años.
«La medida agravaría el abandono y el fracaso escolar» asegura Fernando Fuertes, delegado de enseñanza de CSIF, así como considera que la propuesta del Consejo Escolar Nacional es, de hecho, «una medida electoralista» asegurando que, más que aportar una solución, alargar la edad de obligatoriedad escolar «perjudicaría la convivencia en los centros escolares por los diferentes rangos de edad».
Según este estudio, la gran mayoría de los docentes considera que, más que afrontar y abordar los aspectos negativos de la educación, la medida contribuiría a su empeoramiento, y aseguran que la propuesta del Consejo Escolar Nacional «es un desvío de atención del problema real que hay en la educación, un problema estructural».
Desde ANPE también están de acuerdo en este último argumento. Así lo expresa Gustavo Navas Gil, presidente de ANPE La Rioja, afirmando que este tipo de propuestas son «medidas puntuales que pretenden solucionar problemas muy graves sin entrar a fondo en el problema real del sistema educativo».
Aunque Navas Gil opina que la extensión de edad en la educación obligatoria podría tener «pros», también apunta que son muchas las «contras», y que la medida «por si sola no tiene mucha efectividad», siendo por tanto «fundamental» que vaya acompañada de otras «más importantes», entre las que señala, por un lado, «la flexibilización del sistema educativo» y por otro y más crucial, «que vengan apoyadas en una normativa estable y dotadas económicamente para que la calidad del sistema educativo no se vea disminuida».
Ni a favor ni en contra. La comunidad de La Rioja responde a la propuesta del Consejo Escolar nacional con precaución ante la posibilidad de aplicación de la medida «pensamos que se necesita un exhaustivo estudio de las necesidades educativas en nuestro país en estas edades» ha expresado en declaraciones a El Día de La Rioja la presidenta del Consejo Escolar, Trinidad Sáenz Domínguez, destacando que «estamos a favor de que se haga un análisis de datos y, en función de los resultados, se podría valorar poner en práctica las necesidades de prorrogar hasta los 18 años la enseñanza obligatoria».
La presidenta del Consejo Escolar riojano señala asimismo la necesidad de aplicar las modificaciones pertinentes a los currículos educativos, con el objetivo de satisfacer con éxito las demandas específicas y garantizar la adaptación educativa obligatoria al alumnado en el rango de edad de los 16 a los 18 años «estos alumnos que, supuestamente, no han conseguido ninguna titulación necesitarían de una educación no estandarizada y adaptada hacia una enseñanza más práctica que teórica».
En la actual ley orgánica educativa LOMLOE la enseñanza básica comprende las edades de entre los 6 hasta los 16 años. De manera extraordinaria, los alumnos pueden permanecer hasta los 18 años, siempre que se cumplan en el propio año en que finalice el curso. Por su parte, los alumnos de educación especial pueden estar escolarizados hasta los 21 años.