La Rioja ha dado en los últimos nueve meses luz verde a la declaración de impacto ambiental (DIA) de 22 parques fotovoltaicos y dos eólicos y ha sido la primera comunidad en cumplir con los plazos marcados por el Ministerio para la Transición Ecológica para cumplir con este trámite, para el que, tanto del departamento que dirige Teresa Ribera, como las comunidades autónomas tienen de plazo hasta mañana. Sin perjuicio de ello, estas iniciativas han de superar varios trámites más antes de su puesta en funcionamiento, como la aprobación del proyecto constructivo.
Así lo explica el director general de Transición Energética y Cambio Climático, Iván Moya, que contextualiza este procedimiento en el Real Decreto aprobado por el Gobierno el 23 de junio de 2020 que, entre otros objetivos, pretendía «poner un poco de orden» entre las solicitudes de parques eólicos y fotovoltaicos tramitados antes de ese ejercicio.
El Real Decreto marcó una serie de hitos temporales que, entre otros plazos, fijaba que el 25 de enero debían contar con una declaración de impacto ambiental favorable, lo que les permitirá mantener sus permisos de acceso y conexión, y continuar adelante con el proceso. «Esto ha obligado a todas las comunidades a actuar deprisa y corriendo, lo que ha colapsado y tensionado las administraciones, pero hemos sido los primeros en esta carrera», afirma Moya. Así, se ha tramitado 22 expedientes de parques fotovoltaicos, de los que todos [tres estaban exentos] han recibido el DIA;y seis eólicos. En este caso, solo lo han logrado dos de los seis peticionarios, a dos se les fue denegado y otros dos desistieron.
En conjunto, los parques solares tienen una potencia de generación de 765,97 megawatios, y 68,2 los eólicos, que suponen el 35% de los solicitado. De salir todos adelante, informa Moya, se sumarán a los 13 eólicos ya en funcionamiento con una potencia de 448 MW, y a los 20 fotovoltaicos, que cuentan con una capacidad de generación de 85.
74% en 2030. La energía que, conjuntamente, serán capaces de producir supondrá que el 74% del total de la generada en La Rioja será de origen renovable en 2030, cumpliendo así el Acuerdo de París sobre el cambio climático, que han firmado y ratificado todos los estados miembros de la Unión Europea. «Posiblemente, lo lograremos bastante antes», estima el director general, que informa de que en la actualidad, la mitad de la energía que produce La Rioja es de origen renovable, y el otro 50% procede de la central de ciclo combinado de Arrúbal, que ha de irse desconectando, al igual que la del resto del país, a partir de 2030 para llegar a 2050 con toda la energía generada de carácter renovable.
Pero para cumplir el objetivo de París, las instalaciones han de superar varios trámites más y los promotores han de contar con autorización administrativa previa el 25 de abril, y el 25 de julio el proyecto constructivo, que ha de recibir el visto bueno para obtener la posterior licencia. Disponen de varios años para su construcción de tal manera que podrán ponerse en marcha entre 2024 y 2026.
«Es una tramitación complicada», explica el responsable de Transición Energética, que apunta que, entre otras gestiones futuras que han de supera figura el de la comisión de urbanismo (Cotur), el último escollo que han de salvar.
Al margen de este procedimiento extraordinario, puesto en marcha para desatascar las solicitudes generadas hasta diciembre de 2020, han ido entrando en las administraciones nuevos proyectos, a los que no influyen los plazos marcados por el Real Decreto. El director general de Transición Energética y Cambio Climático informa de que tienen varios en diferentes estadios de tramitación, a los que vaticina que se les someterá a la futura directriz de Suelo. En este contexto, apunta que la actual es «conservadora», y el 66% del territorio de la comunidad cuenta con protección medioambiental o urbanística, que impide la instalación de parques solares o eólicos por lo que «porcentualmente», el número de solicitudes que ha recibido La Rioja es pequeño en comparación de otras comunidades autónomas. En la actualidad, La Rioja genera un 50% más de la energía que consume.