Los  contagios por enfermedades respiratorias en La Rioja siguen aumentando, y ya ascienden hasta los 1.233 casos por 100.000 habitantes, según los últimos datos del servicio de Salud Pública de La Rioja. Se prevé que esta situación se prolongue durante las próximas semanas, ante lo cual La Rioja, ha anunciado, la afrontará través del Plan de Contingencia habitual en esta época del año.

Este plan incluye el acondicionamiento de habitaciones dobles, refuerzos de profesionales, un   protocolo   especial   de   altas, el incremento de los equipos de Hospitalización a Domicilio, duplicar los controles en el Hospital San Pedro y en el Hospital de La Rioja, etc., que la dirección y los profesionales sanitarios se encargarán de adoptar cuando consideren necesario, según informan desde Salud.

Sin embargo, las medidas dispuestas en el plan no contentan a los trabajadores, y es que muchos de ellos, consideran, no serían suficientes para abordar la situación «esto no se soluciona con más personal» y aunque sí que reconocen «aligeraría algo» destacan que el mayor problema es el hospital «se ha quedado pequeño».

«Las camas son las mismas que hace 20 años» critica otro trabajador. Aseguran que llevan en esta situación 20 años «esto no es nuevo, pasa todos los años» a pesar de que en las dos últimas semanas  la situación se ha agravado, «ha subido todo lo respiratorio y a parte de lo que ya existía se suma eso».

Según afirman, la falta de espacio del hospital impide el ingreso de los pacientes que llegan a urgencias, algo que afecta directamente al servicio de ambulancias, que no puede funcionar con normalidad debido a la acumulación de casos y falta de espacio « el colapso hace que las urgencias no pueden ingresar en planta, y se quedan en el box de urgencias, y nosotros tenemos que esperar hasta que haya un box libre, porque aunque la ambulancia esté libre y disponible, si no hay box no podemos hacer nada», cuenta uno de los trabajadores de La Rioja Cuida, .

La situación en el  CARPA, dicen, «es incluso peor» y es que la acumulación de casos de urgencia también se da en este centro, e incluso en mayor medida «a veces la cola da la vuelta al edificio, la gente hace cola desde antes de que abra».

Las quejas ante la situación de colapso y medidas aplicadas desde Salud también se dan desde grupos políticos y sindicatos. «Es un problema endémico de falta de personal, pero también de una infraestructura que permita dar respuesta a este caos» expresan desde el sindicato de enfermería Santse , que ha considerado que el «caos» en el servicio de Urgencias del Hospital San Pedro se debe a la «falta de previsión» de los dirigentes de la sanidad riojana.  

CSIF, por su parte, coincide en este sentido, y expresa que una de las causas del colapso es la «pésima planificación de los permisos y vacaciones del personal sanitario, pero también el déficit de profesionales, el Sistema Nacional de Salud prescindió de 43.000 empleos entre septiembre y octubre de 2023», según datos de la Seguridad Social recogidos por el sindicato.

Asimismo, Izquierda Unida denuncia que «este colapso no es un simple hecho aislado ni estacional, sino una consecuencia directa del adelgazamiento de la sanidad pública y la falta de planificación ante una previsible oleada de gripe»

INCIDENCIA VÍRICA. A pesar de los problemas derivados de los colapsos en los servicios de urgencias, la virulencia de estas infecciones en La Rioja es inferior a la media del resto del país. 

La comunidad ha registrado 15 ingresos por cada 100.000 habitantes, mientras que la media nacional se sitúa en 21 casos, con al menos cinco comunidades por encima, incluso con tasas superiores a los 30 casos.

Desde el pasado fin de semana se están registrando más de 400 atenciones diarias en Urgencias; por esta razón, en el Hospital Universitario San Pedro se ha habilitado el área de pre ingreso, con 18 boxes; se han duplicado diez habitaciones en la séptima planta; y se han incrementado las horas de trabajo médico para favorecer que se agilicen las altas hospitalarias, apoyado por un nuevo protocolo de altas basado en una zona de espera alternativa a las habitaciones.

Ante esta situación, desde Salud recomiendan el uso de mascarilla en espacios cerrados, especialmente con personas vulnerables.