Familiar del acusado y joven agredida se enzarzan en una pelea

R. Muro
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Los hechos ocurrieron hace aproximadamente un mes en pleno pueblo cuando la pariente reprochó a la víctima mentir sobre el autor de la violación. Tuvieron que intervenir 8 agentes

Vista de la plaza del municipio de Albelda de Iregua - Foto: Ingrid

La joven de 28 años agredida física y sexualmente el pasado 8 de marzo y que fue víctima de otra paliza la pasada semana acudirá de nuevo a los tribunales junto a una familiar del acusado de la citada violación por un altercado que terminó en pelea y en el que también tuvieron que intervenir agentes de la Guardia Civil. Según fuentes consultadas por El Día de La Rioja, ambas se enzarzaron en un intercambio de «lindezas» después de que la familiar del acusado le reprochara haber mentido sobre el autor de los hechos que fue ingresado en prisión y puesto en libertad con cargos la pasada semana.

El intercambio de palabras fue caldeándose hasta que ambas comenzaron a agredirse e incluso a «tirarse del pelo». La situación, que ocurrió a media tarde de un sábado, cuando ambas se encontraban en la plaza, obligó a la Guardia Civil a intervenir con hasta ocho agentes que se personaron de forma inmediata en el lugar de los hechos ya que «alguno patrullaba en esos momentos por el barrio de Arriba».

El suceso llevará a ambas a presentarse ante el juez para celebrar un juicio de faltas por lesiones de carácter leve.

Pero no terminan ahí los encontronazos entre ambas familias. Días después de la trifulca en la plaza, coincidieron familiares del acusado con la joven de 28 años en el autobús de línea que enlaza la localidad del bajo Iregua y la capital riojana. Una vez más, comenzaron los reproches si bien, antes de que pasara a mayores, una de las familias (no se ha detallado cuál) fue obligada a abandonar el vehículo tras su llegada al municipio de Alberite. 

Así las cosas, la tensión continúa intacta entre víctima y familiares del acusado desterrado de Albelda. Entre el resto de vecinos la tensión desaparece y crece el hartazgo por una continua sucesión de hechos que rompen la calma de una localidad acostumbrada a residir y a convivir en paz. 

Algún vecino de Albelda de Iregua clamaba ayer porque «todos estos se vayan del pueblo» de una vez. Todos insisten en que son «unos 25 los que siempre generan problemas» en una zona alta en la que conviven alrededor de 1.500 personas.