El déficit de La Rioja en materia de tráfico ferroviario no tiene visos de resolverse a corto plazo. Al retraso que sufre la región en la planificación del corredor de alta velocidad Cantábrico-Mediterráneo, situada en el furgón de cola de las comunidades por donde discurrirá ese eje, se le suma su aislamiento en las previsiones de paso de las denominadas autopistas ferroviarias, que son rutas de transporte de mercancía en las que los trenes cargan con remolques de camiones.
La ausencia de La Rioja de la planificación de esas rutas de carga, cuyo objetivo es minimizar el impacto ambiental del tráfico de camiones por carretera y reducir costes de transporte, ha quedado patente en la jornada 'Claves del presente y el futuro de las autopistas ferroviarias', organizada el lunes por el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), en la que se expusieron las previsiones de desarrollo de esos corredores, que se plasman también en un mapa con los trazados y la información sobre el estado de la tramitación de cada uno de ellos.
Como aclara la propia entidad estatal, adscrita al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, la planificación de las autopistas ferroviarias responde a la demanda de carga, ahorros ambientales, vagones y locomotoras a utilizar y planes de negocio e inversiones en la infraestructura ferroviaria, entre otros aspectos.
De hecho, en la jornada del lunes se anunció la implantación de los servicios de autopistas ferroviarias en la conexión de ancho ibérico entre Zaragoza y Tarragona, a través de Lleida.
Para ello, licitará en el primer trimestre de 2024 la redacción de los proyectos que adaptarán los gálibos de 6 túneles y 16 pasos superiores a los tráficos que generen estos servicios. La inversión estimada supera los 60 millones de euros.
Adif considera que esa línea es clave para el despliegue de las autopistas ferroviarias en España, al ser la de mayor demanda, con más de 100 circulaciones por semana.
Además, al estar incluida en el Corredor Mediterráneo, «posibilitará los futuros servicios en los itinerarios desde Algeciras, Huelva y Vitoria con Tarragona y Barcelona, aprovechando las sinergias entre el transporte marítimo y ferroviario».
No se trataría, por tanto, de una planificación que nazca desde la entidad estatal para definir por dónde deben discurrir esas rutas ni que proyecte la construcción de infraestructuras, sino de habilitar las autopistas ferroviarias allí donde se constante el interés por parte operadores logísticos, autoridades portuarias y empresas ferroviarias por transportar semirremolques del tipo P-400 (remolques de camiones tráiler con medidas estándar adaptadas al ferrocarril) sobre vagones de tren.
Con todo, La Rioja queda al margen del paso de estas autopistas ferroviarias, que discurren muy cerca de su territorio, por el citado corredor que permitiría unir la línea Zaragoza-Tarragona con Vitoria por Navarra sin pisar suelo riojano.
Burgos, vitoria...También están previstas otras que pasan por Burgos, como el itinerario Azuqueca/Zaragoza-Tarragona; Oporto-Entroncamento-Badajoz Azuqueca; Azuqueca-Valladolid-Burgos-Vitoria. De hecho, en el mapa de servicios de autopistas ferroviarias propuestos por los operadores privados hay rutas por toda España, salvo la cornisa cantábrica (excepto País Vasco) y La Rioja.
El impulso a esta modalidad de transporte de carga se justifica por el importante ahorro en costes, ya que el traslado de mercancías por carretera es siete veces más caro que el ferrocarril, y por las emisiones de gases de efecto invernadero, una quinta parte de las que genera el tráfico rodado con camiones.
Como apunta Adif, los operadores logísticos valoran que una parte importante de los tráficos del trayecto Zaragoza-Tarragona procedan de Turquía, Italia y Marruecos con llegada a los puertos marítimos de Tarragona, Barcelona y Algeciras por las denominadas 'autopistas del mar'.
La FER alerta de la pérdida del «tren de la competitividad» en el sector logístico
La Federación de Empresas de La Rioja (FER) no oculta su malestar por las previsiones que aparecen en la documentación difundida por Adif sobre la red de autopistas ferroviarias de mercancías. «El Gobierno central vuelve a excluir una vez más a La Rioja de los principales nudos de comunicaciones, dejándola abandonada y sin una política inversora real», aseguró a El Día de La Rioja el presidente de la patronal riojana, Jaime García-Calzada. A su juicio, esta carencia hará que la región pierda «el tren de la competitividad» en el sector de la logística, «donde gracias a la apuesta y a la inversión privada podemos estar mejor comunicados por ferrocarril con los puertos marítimos de Barcelona y Bilbao, con la importancia que esto tiene en las salidas de nuestras mercancías y en la exportación». La FER critica que se considere a La Rioja como «una región de segunda categoría» y alerta de que seguirá «acumulando un retraso histórico de más de 30 años». García-Calzada exige que La Rioja forme parte de las principales redes españolas y europeas en las redes logísticas ferroviarias, «para que nuestras empresas pueden ser cada vez más competitivas».