La UGAR ha rechazado este viernes que las bodegas que hayan adquirido vino recientemente, sobre todo a cosecheros y cooperativas, puedan ahora enviarlo a la Alcoholera y acceder a la subvención las que recibieron ayuda al almacenamiento en 2020. También ha rechazado la "abrumante" burocracia que se exige para acceder a estas ayudas, lo que penaliza a las pequeñas bodegas, ha indicado en una nota.

Ha recordado que, desde que durante la pasada primavera el sector vitivinícola solicitó activar las ayudas a la vendimia en verde y a la destilación de crisis, la UAGR ha defendido que esta subvención debería excluir a las bodegas que hayan adquirido vino a otros operadores de la DOCa Rioja, como cooperativas y cosecheros, fundamentalmente.

Esas bodegas, si además del vino que elaboran con uvas propias o adquiridas a viticultores, han comprado vino recientemente, significa que "no tienen un problema de excedentes, por lo que deberían haberse excluido de las ayudas", ha precisado.

Ha relatado que en los últimos meses se han formalizado operaciones de compra-venta de vino a 10 euros la cántara, "especulación que incumple claramente la Ley de la Cadena", ha dicho; y, además, cantidad inferior a la que se cobrará por destilar, lo que ha considerado como "un hecho incomprensible".

La UAGR defiende que se excluyera de las ayudas para destilación de crisis el vino que ya recibió ayuda para almacenamiento en 2020, pero la orden publicada por el Gobierno de La Rioja "no deja fuera claramente a estos vinos, sino que otorga menor puntuación a las bodegas que fueron subvencionadas por este concepto".

Así, vinos que ya recibieron ayuda al almacenamiento, por ejemplo, mientras eran criados en barrica, podrían ahora volver a beneficiarse de fondos públicos con la destilación, según la UAGR.

Burocracia. Esta organización agraria entiende que la tramitación de esta ayuda, con solo 5 días hábiles para solicitarla, "complica mucho, si no impide", que pequeñas bodegas puedan acceder a la subvención.

Los requisitos que se piden podrán cumplirlos sin muchos problemas las grandes compañías, acostumbradas a gestionar pesadas tareas burocráticas, pero resulta "muy dificultoso" para las pequeñas bodegas de cosechero, ha insistido.

La UAGR pondrá a su disposición todos los recursos necesarios para que las solicitudes puedan ser tramitadas a tiempo.

Respecto al precio tomado como referencia para los compromisos de contrato que han de presentar las bodegas para acceder a esta ayuda, la UAGR ha afirmado que los 68 céntimos indicados como referencia no garantizan la rentabilidad de los viticultores.

Ha incidido en que no ha participado en la redacción de la orden de ayudas a la destilación de crisis y, al no darse plazo de exposición pública, no ha podido realizar aportaciones que la mejoraran