La temporada de caza de paso de palomas en el territorio que gestiona la Hermandad de las Trece Villas, en el Camero Nuevo, comenzó el pasado día 12 y no precisamente de forma plácida. Los municipios que conforman esta agrupación histórica, constituida hace más de 500 años, reclaman una solución al impago, por parte del vecino municipio de Laguna de Cameros, del 22 por ciento que le correspondería al por los ingresos económicos que se obtienen del aprovechamiento cinegético de los 19 puestos de caza que se sacan a subasta.
Como explica el presidente de la Hermandad y alcalde de Pinillos, Simón Amuchastegui, la entidad no ha percibido durante los últimos cuatro años la parte de esos ingresos, que sí venía ingresando durante los 43 años anteriores, merced a un convenio firmado en 1977 por los alcaldes de la zona. Aquel acuerdo establecía la obligación del Ayuntamiento de Laguna de Cameros de pagar a los municipios de la Hermandad el 22% de lo que recibe por los puestos de caza de paloma en el monte Los Lapazares.
La reclamación de la Hermandad ha adquirido más fuerza con un informe topográfico realizado en julio por encargo de Amuchastegui, que determina que de los 19 puestos de caza de paloma que se explotan, y que desde hace cuatro años solo rentabiliza Laguna, 12 se encuentran en este último municipio, pero los siete restantes pertenecen a Lumbreras, una de las 13 villas que forman la agrupación.
El asunto se ha debatido ya este año en tres reuniones de la Junta Directiva y volverá a tratarse hoy. Además, se recurrió al director general de Medio Natural y Paisaje del Gobierno de La Rioja, Ignacio Sáenz de Urturi, para ejerciera de mediador entre Laguna y los municipios de la Hermandad. Sin embargo, ese acuerdo no ha sido posible hasta ahora, de manera que los integrantes de la Hermandad plantean repartir los 19 puestos, de forma que Laguna gestione los 12 que están en su término y el resto de la entidad los 7 de Lumbreras.
A expensas de que esa posibilidad pudiera cristalizar, hay otra circunstancia que ha calentado los ánimos. Como explica el presidente de Las Trece Villas, las tarjetas que se entregan a los cazadores que pagan para utilizar los puestos de paso de paloma se habían repartido ya los pasados días 8 y 9, sin que se haya resuelto el conflicto entre las dos partes. Sin ocultar su malestar, Simón Amuchastegui señala que el director general le aseguró que las tarjetas las tenía él (es el Gobierno de La Rioja, que forma parte de la Hermandad, quien debe gestionar esos permisos) y que no las entregaría hasta que hubiera un acuerdo entre Laguna y los municipios de las Trece Villas.
Considera totalmente anómalo e incluso de legalidad discutible que haya cazadores que tengan una tarjeta otorgado por Laguna para abatir palomas en puestos que están en Lumbreras.
Apunta el máximo responsable de la Hermandad que el alto cargo del Gobierno ha abandonado su labor de mediación y ahora mismo el desenlace de este desencuentro es incierto. A su juicio, la solución pasa por dividir los puestos, con fichas diferentes, para que Laguna gestione sus 12 puestos y reciba los ingresos por ellos, y de los 7 restantes se encargue la Hermandad.
El director general de Medio Natural declinó ayer realizar declaraciones a El Día de La Rioja, pero trasladó, a través de la oficina de comunicación de la Consejería, que inició un proceso de mediación y dialogo, pero considera que son ambas partes las que deben buscar un acuerdo.
Este periódico intentó ayer, sin éxito, localizar al alcalde de Laguna de Cameros, Juan Simón Lasanta, para conocer su versión.
Aunque no hay una cuantificación exacta del dinero que la Hermandad asegura haber dejado de ingresar, su presidente estima que podría rondar los 30.000 euros por los cuatro años, dado que el último cobro fue de unos 5.000 euros. Desconoce cuánto estará abonando el adjudicatario de los puestos al Ayuntamiento de Laguna, pero los cazadores pagan 1.150 euros por cada uno de ellos.
Doce villas y el Gobierno regional
A quien se tome la molestia de enumerar los municipios que conforman la Hermandad de las Trece Villas, una agrupación creada en 1490 con el fin de explotar los pastos en el monte La Pineda, en Lumbreras, le chocará que solo aparezcan 12. La razón es que el miembro número 13 es el Gobierno de La Rioja, que adquirió su parte a Castañares de las Cuevas, aldea de Viguera. El resto de la agrupación la integran Almarza, Gallinero, Lumbreras, Nestares, Nieva, Ortigosa, Pinillos, Pradillo, Torrecilla, Viguera, Villanueva y Villoslada. La Hermandad no se libra de otra controversia: la reivindicación de El Rasillo de formar parte como municipio independiente, con el argumento de que históricamente lo fue como aldea de Ortigosa, de la que se independizó en 1817. Sin embargo, la Hermandad no acepta esa reclamación, que supondría que los demás municipios renunciasen a a una parte de sus participaciones.