María Eguizábal (Arnedo, 1978) es el 50% de ELYELLA, uno de los dúos más reconocidos del panorama musical español. Pero si la identidad de MØNØ es una incógnita, ELLA, lejos del escenario, se quita el antifaz para desarrollar una intensa actividad en VananaRecords, sello creado en 2017 junto a Amatria y Pau Paredes, y en Goldenbeat, agencia de representación.
Las jornadas de María Eguizábal duran 24 horas aunque muy bien aprovechadas. «El día lo dedico a los artistas», se ríe, «y la noche, a ELYELLA». Gracias a «mi gran equipo de Vanana», explica, «puedo compaginar ambas actividades». No en vano, cultiva su alma noctívaga desde sus tiempos de estudiante de Económicas en la UPNA.
Tras formarse en París, Exeter y Rabat, llegó a Madrid para hacer un Máster de Gestión Cultural. Abandonó su trabajo en el departamento de actividades públicas del Centro 2 de Mayo (Móstoles) para dedicarse, en cuerpo y alma, a la música, una pasión alimentada «desde pequeña» gracias a Radio 3 (Paco Pérez Bryan fue su locutor de cabecera y ahora lo es Virginia Díaz, una gran impulsora de la escena musical independiente). «Siempre he sido muy indie», aclara.
Acaba de volver del FIB («es un festival increíble, en el que nací como público y en cuyo cartel llevo tres años consecutivos») y, recientemente, se desplazó a la madrileña Sala Sol (uno de los templos de la música independiente) para recibir dos discos de oro después de que Que nada nos pare (lo más importante) con La La Love You y Todo lo que importa con Viva Suecia totalicen más de diez millones de reproducciones. «ELYELLA», recuerda, «nació porque queríamos hacer nuestra música, sin grandes pretensiones y de repente llegó Todo lo que importa y conectó con el público». «Que nada nos pare», prosigue, «ha sido una locura porque es una canción que suena mucho, que se hizo viral en redes, que se ha compartido y que todo el mundo ha hecho suya».
El 24 de agosto la veremos en el Ezcaray Fest, en un concierto que espera expectante toda vez que «hacemos pocas actuaciones, una media de dos por mes».«Son shows muy grandes», reconoce.
En el pasado tomó parte del cartel del Fardelej y al frente de ELYELLA reivindicó al Coro Cuchuflete, tan arnedano como los fardelejos: «En 2017 lanzamos Magic, un EP con Todo lo que importa. Después llegó Dreamers (2019), nuesto primer disco que incluía Hola, ¿qué tal? Invitamos a Jero Romero y vimos que nos encajaba meter un coro de niños. Pensé en el de Arnedo, que es increíble», rememora. «En el Teatro Cervantes lo grabamos pero en 2020 irrumpió la Covid y lo paró todo. En 2022, conseguimos que subieran al escenario de La Riviera», agrega.
Desde 2019, el éxito acompaña a María Eguizábal que, además, gracias a su sello ha relanzado a grupos como Ginebras o Karavana, formaciones sin las que no se puede entender un verano musical plagado de citas.