La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps) alertó el pasado mes de febrero sobre los problemas de suministro de bolsas de orina debido a varios problemas en la producción de algunos fabricantes europeos que las distribuyen.
El problema es que la Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP) y la Confederación Española de Personas con Discapacidad Física y Orgánica (Cocemfe) aseguran que esta situación se ha agravado, así que hay comunidades autónomas que han tomado una serie de medidas.
En el caso de La Rioja, el presidente del Colegio de Farmacéuticos de La Rioja, Mario Domínguez, afirma que los ciudadanos de esta región que necesitan comprar bolsas para la recogida de orina no tienen motivo por el que preocuparse. Reconoce que existe un problema europeo de fabricación, por lo que hay ciertas bolsas que no hay en el mercado pero «hay otras que son equivalentes, por lo que las pueden sustituir».
Explica que si hay una bolsa de cama de dos litros de una marca determinada que no está, en La Rioja hay otras bolsas de cama de otras marcas que se pueden usar de igual forma. «O bolsas de pierna que llevan una válvula de vaciado, en vez de ser de un tipo, es de otro», añade el farmacéutico.
El problema, señala, viene cuando alguien busca una bolsa concreta. «Si veo una persona que quiere una bolsa que es la que le gusta y le va bien, pero tiene otra que es equivalente que le puede servir, hay que hacerle ver que la solución está ahí», apunta.
Esta medida de sustitución está apoyada por la Consejería de Salud, ya que «el objetivo es dar una solución a todos los pacientes que lo requieran». «Esta última semana hemos hecho un seguimiento en farmacias y no hemos encontrado ninguna que no haya podido dispensar una bolsa, de una marca u otra, para dar solución a sus pacientes», asegura.
Subraya que la coordinación de las farmacias con la administración es «permanente», ya que «tanto la Agencia de Medicamentos, como la Consejería de Salud, y las farmacias, están todas vigilantes». «Si se detectara algún problema de suministro, estamos en disposición, tanto la dirección general de farmacia, como el colegio de Farmacéuticos, a articular los sistemas que sean necesarios para intentar buscar solución», afirma Domínguez.
Plantea a todos los pacientes que necesiten una bolsa y crean que no las haya, que contacten con su farmacia habitual o con el Colegio de Farmacéuticos para «buscar una solución entre todos».
Afectados. Mario Domínguez explica que los pacientes afectados por esta situación son los que padecen enfermedades oncológicas, daño cerebral, alguna lesión medular o personas operadas de la próstata, entre otras.
Reconoce que es un tema que «preocupa» a estas personas, ya que «vienen a las farmacias para ver si hay bolsas o cuando va a haber más». «Lo que se hace es buscar las que hay o una equivalente para darles una solución», señala.
Admite que si se diese el caso de que no hubiera suministro de este producto, sería un problema. «Pero existe una coordinación para buscar bolsas a nivel industrial y ponerlas a disposición de los pacientes», asegura.
Otro aspecto que también hay que tener en cuenta es la durabilidad de estas bolsas de orina. Detalla que hay unas que cuando se llenan se tiran a la basura, mientras que hay otras que llevan una válvula para vaciarlas y cada cierto tiempo se cambia por otra nueva. «Todo depende del tipo de ostomía, urostomía o de sondaje que se les haga a los pacientes», indica.
Este presidente explica que el problema del suministro «viene siendo el mismo desde hace tiempo». «La producción de productos médicos e incluso de medicamentos se centraliza en sitios concretos y cuando una empresa que hace bolsas o de un determinado medicamento falla, cae el proceso», lamenta.